madrid - La deuda de la Seguridad Social cerró mayo en 46.821 millones de euros, cifra un 71% superior a la existente al finalizar 2017 y un 13,6% por encima de la que se registraba al arrancar este año, según datos del Banco de España.
Este repunte de la deuda se debe a los préstamos que ha concedido el Estado a la Seguridad Social en los últimos años para garantizar el pago de las pensiones. La factura mensual de las pensiones supera actualmente los 9.600 millones de euros, pero en los meses en los que hay paga extra, esta se duplica.
El endeudamiento de la Seguridad Social se mantuvo más o menos estable en el entorno de los 17.173 millones de euros hasta el tercer trimestre de 2017, cuando empezó a repuntar debido al préstamo del Estado, por valor de algo más de 10.000 millones, que se concedió en dicho ejercicio para el pago de las pensiones. Así, finalizado 2017, la deuda de la Seguridad Social era de 27.393 millones de euros, unos 10.200 millones superior a la que tenía al finalizar 2016.
Durante los cinco primeros meses de 2018 la deuda de la Seguridad Social se mantuvo cerca de los 27.400 millones de euros, pero al llegar el mes de junio repuntó hasta los 34.888 millones de euros al liberarse la mitad de los casi 15.200 millones del préstamo que el Estado concedió a la Seguridad Social en aquel ejercicio. La otra mitad del préstamo de 2018 se liberó el pasado noviembre, lo que elevó la deuda del sistema hasta los 41.194 millones al finalizar 2018.
En lo que respecta a este año, el Gobierno de Pedro Sánchez aprobó el pasado mes de marzo la concesión de un préstamo del Estado a la Tesorería General de la Seguridad Social por importe de 13.830 millones de euros para pagar las pensiones. En los meses de junio y noviembre, la Seguridad Social abona conjuntamente la nómina ordinaria y extraordinaria de las pensiones, un desembolso que alcanza actualmente los 19.000 millones y que puede generar tensiones de liquidez al sistema.
La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social en funciones, Magdalena Valerio, afirmó hace unos días que en España “no hay un elevado gasto en pensiones” y que, por tanto, el sistema “no tiene un problema de gasto excesivo”, sino que “tiene un problema de déficit de ingresos”. - E. P.