Vitoria - El cuartel general de Mercedes Benz en Stuttgart parece ya tener claro quién será el sustituto de Emilio Titos al frente de su planta de Vitoria, una de las joyas tecnológicas del consorcio alemán. Aunque no se ha producido ninguna comunicación oficial, la multinacional automovilística estaría sopesando el nombre de Rainer Boehm, un ingeniero alemán con sólida formación profesional dentro de la casa que, además, conocería a la perfección el que sería su nuevo destino, donde ya estuvo hace aproximadamente una década como responsable máximo del departamento de Calidad.
Un cargo éste de la máxima confianza de Alemania hasta el punto de no depender de la dirección de Vitoria sino de la matriz en Stuttgart. Según fuentes de la compañía, Boehm y su familia ya habrían visitado en las últimas semanas las propias instalaciones de Ali Gobeo así como la capital alavesa, donde estarían ultimando los detalles para fijar su residencia. De concretarse finalmente este nombramiento, el directivo teutón se convertiría en el segundo ingeniero alemán encargado de dirigir la planta vitoriana en las últimas décadas tras el caso de Volker Heuer, que estuvo al frente de la misma en los primeros compases de la década de 2000 hasta la llegada poco después del portugués Armando Gaspar (2004-2007) y Emilio Titos, que asumió las riendas de la factoría el 1 de enero de 2008 después de una etapa de alta tensión social que llegó incluso a quebrar la confianza entre la directiva de Mercedes y Vitoria.
Afortunadamente, el aplomo y saber hacer del granadino no solo permitió voltear la situación, sino que la planta alavesa se convirtió a partir de entonces en uno de los mayores referentes tecnológicos de todo el consorcio alemán, volcado en estos momentos en un ambicioso proyecto de movilidad eléctrica que se prevé concluya el año que viene -cerca del mes de mayo- con el lanzamiento del nuevo modelo de Clase V eléctrica. Un nuevo hito en la historia de Mercedes con sello 100% alavés. Sea Rainer Boehm finalmente el elegido para pilotar ahora la principal nave automovilística de Euskadi -da empleo a 5.000 personas y representa el 5% del PIB de Euskadi- u otro colega, de lo que no hay duda es de que el legado industrial que deja Emilio Titos es mayúsculo, con una de las plantas más automatizadas del planeta, un compromiso técnico por parte de su plantilla envidiable y una obsesión por la calidad con pocos precedentes en la historia de la factoría de Ali Gobeo.
retos por delante Un punto de partida, en cualquier caso, a la altura de la misma naturaleza que los retos que el nuevo máximo responsable tendrá a partir de ahora por delante y que al contrario que en la época más gloriosa de la factoría -la que se inició en 2014 con el lanzamiento desde la capital alavesa de los nuevos modelos Vito y Clase V-, esta vez no serán de guante blanco. Más al contrario. Tal y como aseguraron esta misma semana en su visita a la fábrica los dos popes de la división Vans, Marcus Breitschwerdt, su director, e Ingo Ettischer, el jefe de Operaciones, la difícil coyuntura internacional va a obligar al consorcio alemán a acometer una serie de ajustes en todas sus plantas, entre ellas la de Vitoria, a la que solicitaron “tranquilidad”.
Si todo transcurre con normalidad, el núcleo duro de Mercedes se reunirá el próximo 24 de julio para diseñar un plan de previsiones a la baja y correcciones varias que, en el caso de Vitoria, darán a conocer el lunes 29 de julio. Será una tarea incómoda que se aplicará después del verano y que augura un otoño caliente. Quizá sea Emilio Titos el encargado de volver a lidiar con ella o quizá sea su sustituto. Las incógnitas ahora mismo hacen posible cualquier escenario, si bien la realidad marca que el adiós de este dirigente granadino de profundo carácter alemán y alma alavesa, probablemente el más cercano a la plantilla, es solo cuestión de tiempo.