Vitoria - Hace ya demasiado tiempo que la temperatura social en Mercedes viene registrando un comportamiento similar a la climatológica propia de estos días de verano. Demasiadas semanas conviviendo con la incertidumbre y aguardando noticias, en este caso desde Alemania, cargadas de no pocos nubarrones como consecuencia de la guerra al diésel que el Gobierno central desató hace ahora un año y que viene lastrando desde entonces el comportamiento de una planta modelo como la de Ali Gobeo. En este clima de tensión, las casi 5.000 personas que cada día dan vida a esta ciudad -la mayor de Euskadi- conviven a diario con no pocos rumores, comentarios infundados o, directamente, fake news que corren como la pólvora a través de las redes sociales, desatando muchas veces una tormenta perfecta que obliga a la Dirección, en este caso a través de su departamento de Recursos Humanos, a salir al paso para tratar de encauzar una situación previa y falsamente viralizada.

La última actuación en este sentido se produjo el pasado lunes, cuando se extendió entre la plantilla la idea por parte de Mercedes de desconvocar la jornada del próxima 26 de julio, viernes, con la idea de aprovechar la festividad de Santiago del dia anterior y generar un puente que se extendería hasta el miércoles de la semana posterior, 31 de julio, aprovechando la falta de trabajo que aparentemente está marcando el día a día de la fábrica en las últimas semanas. Pues bien, nada más lejos de la realidad. Mercedes negó en rotundo el bulo difundido y aseguró que se trabajará con “normalidad” todos los días de julio, a excepción del sábado día 20, que como se anunció la semana pasada fue desactivado debido a ajustes en el programa.

Precisamente al hilo de este asunto, la plantilla pudo conocer ayer que la reunión prevista para esta semana por parte de la Dirección para efectuar un nuevo ajuste en el programa anual de la planta se retrasará hasta la siguiente semana. A día de hoy, la planta de Ali Gobeo mantiene el objetivo de ensamblar 148.000 unidades para el presente año, si bien, todas las fuentes consultadas por este periódico indican que dicha cifra registrará una reducción significativa como consecuencia de la caída de las ventas. Quedará por ver entonces en qué punto queda la situación de la plantilla, pues las medidas de flexibilidad previstas están ya al límite y las perspectivas de crecimiento en el sector no terminan de llegar.