Vitoria - Aunque el convencimiento de que el proyecto cuenta con una base sólida para salir al mercado con ciertas garantías, sus promotores son conscientes de que la otra base, la pública, debe cobrar tanta relevancia, o incluso más, que la idea en sí misma. Porque si de lo que se trata es de que estas bicicletas Made in The Basque Forest enamoren a primera vista hace falta un plan de marketing y comunicación al uso que realce el valor y singularidad de un producto tan exclusivo. Por eso en los próximos días, probablemente el viernes que viene en la sede bilbaína de Beaz Bizkaia, sus impulsores explicarán los detalles de la campaña de de crowdfunding que acaban de lanzar con un doble propósito. Divulgar la filosofía y contexto del proyecto y generar las suficientes expectativas para levantar una inversión de entre 150.000 euros y 300.000 euros. Aunque buena parte de esta necesidad financiera ya estaría cubierta -al margen de la apuesta de los siete socios y Seed Capital Bizkaia, el proyecto también cuenta con un relevante inversor indio estrechamente ligado a la movilidad-, entienden necesario en Axalko contar con cierta libertad financiera para acometer cuantas mejoras sean necesarias.

A partir de ahí, tocará ponerse manos a la obra y salir al mercado a competir. El plan previsto para este año contempla la fabricación de 50 unidades, que serán 150 en 2020, 450 un año después y 999 -“nunca mil”, advierten- en 2022. ¿Dónde está la rentabilidad del proyecto con series tan cortas?, se les pregunta. Axalko cifra el punto de equilibrio en unas 144 unidades al año, unas 12 al mes. Ni que decir tiene que el coste de cada una será elevado, y de momento no público, pero si se pretende democratizar este transporte y extenderlo por Europa como una balsa de aceite, “antes debemos contar con una base sólida”, subraya Fernández mientras despacha un email con Cyclabe, el socio comercial francés con el que han alcanzado un acuerdo para sembrar el país galo de bicis con alma vasca. Las 50 boutiques que tiene repartidas por las principales capitales a buen seguro que facilitarán la entrada que Axalko necesita. - A. Goñi