gasteiz - El Gobierno Vasco mostró ayer su “preocupación” por la repercusión para la flota vasca de la bajada del 20% establecida para la cuota del verdel por la Comisión Europea, al considerarla una pesquería “importante para los pesqueros vascos”. En su opinión, el descenso repercutirá de manera negativa, “teniendo en cuenta la ya limitada cuota que actualmente disponen los arrantzales de Euskadi, un 1%”.

En un comunicado, el Ejecutivo vasco recordó que la captura total de verdel rondó en el año 2018 las 950.000 toneladas, de las que España pescó 33.000 y la flota vasca 11.000. Es decir, “la flota vasca supone una parte muy pequeña del conjunto, lo que explica que, habiendo verdel en nuestras aguas, la reducción de la cuota responde a decisiones que se toman en base al estado general del stock, que no es bueno, y no atendiendo a circunstancias locales”.

Respecto al resto de pesquerías, el Ejecutivo vasco recibió con “moderada satisfacción” el reparto de cuotas de pesca fijado para 2019, cuya negociación se ha cerrado esta semana para la flota vasca con el mantenimiento de cuotas en anchoa y merluza del Cantábrico y el incremento en las de bonito del norte (10%), merluza de la costa francesa (22%), rape del Cantábrico (5%), gallo del Golfo de Bizkaia (40% más) y chicharro del Golfo, otro 18% más.

En lo que afecta a la flota vasca, el Ejecutivo autónomo ha valorado que, en general, la “situación de partida” de las negociaciones “era buena”, ya que en la mayoría de especies de interés o se proponen “importantes incrementos”, como en la merluza de la costa francesa o el chicharro. - DNA