BILBAO - La gran banca del Estado español va a continuar con el importante proceso de transformación emprendido a consecuencia de la crisis de 2008. El próximo 2019 los dos grandes bancos, BBVA y Santander, estrenarán nuevos equipos directivos.

Además, con la particularidad, de que por primera vez en la historia de la banca española, un extranjero tomará el mando en uno de los grandes bancos. El italiano Andrea Orcel, procedente del suizo UBS, sustituirá a partir del 1 de enero próximo a José Antonio Álvarez como consejero delegado del Banco Santander, la entidad financiera cántabra presidida por Ana Botín.

La internacionalización de los bancos y la presión de los fondos internacionales que forman parte de su accionariado están cambiando la fisonomía de los consejos de administración.

En el caso del Banco Santander con el nombramiento de Orcel, son cinco los miembros del consejo de administración de la entidad que no han nacido en España. El vicepresidente no ejecutivo Bruce Carnegie-Brown nació en Sierra Leona, aunque es nacionalizado británico; Homaira Akbari, consejera independiente, es iraní, nacida en Teherán -aunque también tiene la nacionalidad estadounidense y la francesa-; Carlos Fernández González, consejero independiente, es una de las grandes fortunas de México; y Álvaro Antonio Cardoso de Souza, consejero independiente, presidente no ejecutivo de Santander Brasil, es portugués, aunque nacionalizado brasileño. Si el difunto Emilio Botín levantara la cabeza no reconocería los efectos de la globalización en la cúpula de su banco. -X.A.