madrid - El BBVA compró en junio del año pasado un 9,95% de las acciones del turco Garanti Bank por 917 millones de dólares, unos 791 millones de euros, con lo que su participación total en esa entidad financiera pasó a ser del 49,85%. La entidad considera que la crisis que vive el país otomano, con una fuerte depreciación de la lira y una alta inflación, no afectará a los resultados del grupo, ya que cuenta con una política de cobertura que protege el capital y los beneficios procedentes de Turquía ante depreciaciones de la lira turca, según explicó el banco.

Además, BBVA cuenta con un modelo descentralizado con filiales autosuficientes y responsables de la gestión de liquidez, remarcó la entidad, sin que exista transferencia de liquidez o financiación cruzada desde la matriz a las filiales o de las filiales entre sí, eliminando el riesgo de contagio de una división del banco al resto del grupo.

La agencia de calificación de riesgos Standard & Poor’s (S&P) predice que la tasa de inflación de Turquía alcanzará el 22% en el cuarto trimestre de 2018. La “excepcional” depreciación de la lira en agosto “y un significativo endurecimiento de las condiciones de financiación, tanto internas como externas”, así como una caída de la confianza, “creemos, socavará la economía turca”, señalan los expertos de S&P respecto a la evolución de Turquía. - E. Press