donostia - La recuperación económica ha propiciado un renovado interés por la innovación en Euskadi, donde en 2016 las inversiones dirigidas a actividades de I+D crecieron por primera vez en cuatro años, en concreto un 1,4%. Esta reactivación, sin embargo, no ha evitado que la CAV se mantenga por debajo de la media europea en gasto destinado a la innovación tecnológica y no tecnológica, desventaja que viene arrastrando desde 2012.
Aún queda camino por recorrer, según se desprende del Informe de Innovación 2018 elaborado por Innobasque que fue presentado ayer por su presidente, Manuel Salaverria, y su directora general, Leire Bilbao, con motivo de la celebración en el Kursaal de Donostia del encuentro Global Innovation Day.
Los últimos datos, correspondientes a 2016, indican que el gasto de empresas, administraciones públicas y enseñanza superior en I+D representa en Euskadi un 1,82% de su Producto Interior Bruto, mientras que en el caso europeo este porcentaje se eleva al 2,03%. La diferencia es similar de atender únicamente al gasto que realizan las empresas, que se sitúa en un 1,03% del PIB frente al 1,32% europeo.
Manuel Salaverria explicó que esta distancia se puede deber a que el tejido empresarial vasco ha empleado los primeros años de recuperación económica a reparar los daños más relacionados con la producción provocados por la crisis (la información corresponde a 2016), sin tener mucho margen para actuar sobre la innovación.
Sin embargo, tanto el presidente de Innobasque como su directora general incidieron en que ya los últimos datos apuntan a cierto cambio en la tendencia, dado que la inversión en I+D creció un 1,4% por vez primera en cuatro años. Innobasque atribuye este incremento a que también subió la financiación pública y privada.
Este esfuerzo inversor ha tenido como resultado que Euskadi sea la única comunidad autónoma del Estado calificada como “región de alta innovación” por parte de la Comisión Europea, que la considera “polo de innovación”, tal como recoge el informe.
Salaverria y Bilbao citaron como uno de los factores que permiten a la CAV disfrutar de esta posición la mayor eficiencia del sistema innovador. La directora general de Innobasque mencionó específicamente que el porcentaje de ventas de nuevos productos sobre la facturación de las empresas vascas ha crecido 3,6 puntos porcentuales, mientras que las exportaciones de los sectores con un medio o alto nivel tecnológico se han incrementado un 72,4% con respecto a los años de la crisis económica.
Junto con esta mejoría, otros síntomas positivos son la mejor cualificación del personal empleado en actividades de I+D con un incremento de investigadores y de trabajadores con el título de doctorado, a lo que Innobasque añadió la mayor presencia femenina en el sector.
Aún así, quedan todavía asuntos por resolver. El Informe de Innovación 2018 de Innobasque, el segundo que realiza este organismo, detecta un aumento de la brecha del gasto empresarial en I+D de Euskadi con respecto a los 28 países de la Unión Europea. En el ámbito internacional, además, los retornos europeos del programa H2020 de innovación que crecían en la última década “han tocado techo”, advirtió Manuel Salaverria.
pymes Un dato que podría ser positivo como es el hecho de que la mediana empresa ha adquirido un mayor protagonismo en la I+D al superar por primera vez en 2016 a las grandes firmas en inversión en innovación se matiza al observarse la “debilidad” de las pymes en innovación en organización y comercialización o marketing -Euskadi ocupa el puesto 167 respecto a 220 regiones europeas-, y en las inversiones en maquinaria avanzada, software o patentes.
Esta fragilidad es la que Innobasque pretende combatir para situar a las pymes en la vanguardia de la I+D, al “representar la base del tejido empresarial vasco”. De hecho, según anunciaron ayer Manuel Salaverria y Leire Bilbao, el nuevo plan estratégico de Innobasque 2020 tiene como foco a las pequeñas y medianas empresas, a las que se les tratará de dotar de herramientas para que incrementen su innovación. Un ejemplo fue la celebración ayer del Global Innovation Day.
Estudio. Innobasque ha realizado un sondeo entre más de 250 profesionales de la I+D+i vasca para recoger sus consideraciones en el Panel BIP.
Situación actual. Los expertos consultados evalúan la situación de la innovación en el conjunto de Euskadi con una nota del 6,63, lo que representa un incremento del 3,9% respecto a 2016, primer año que fueron consultados.
Prioridades. Incrementar la capacidad de las pymes para que incorporen tecnologías avanzadas y trabajen la innovación no tecnológica es una de los aspectos subrayados, junto con la necesidad de un sistema educativo capacitador para las carreras investigadoras.
Previsiones. Más del 83% del Panel BIP cree que la inversión en I+D+i crecerá en los próximos años y un 32% estima que este ascenso se situará entre un 3% y un 6% anual.