bilbao - El diálogo social vasco, ya muy condicionado por la ausencia de ELA y LAB, queda herido de muerte al anunciar ayer CCOO que abandona tanto la mesa tripartita permanente como el foro específico para atajar la brecha salarial de género. Un movimiento con el que la central de Loli García había amagado en otras ocasiones y que ahora ha decidido llevar a la práctica tras el último acuerdo en materia de empleo y formación suscrito entre Gobierno Vasco y Confebask. Tanto el Ejecutivo como la patronal pidieron al sindicato que reconsidere su decisión, aunque parece difícil que el diálogo social pueda salir de la vía muerta a corto plazo. UGT también anunció que estudiará la semana que viene la posibilidad de abandonar las mesas.

El acuerdo firmado este pasado lunes entre Confebask y Gobierno Vasco está orientado a mejorar el acceso al empleo a jóvenes y personas desempleadas y de baja cualificación en el periodo 2018-2020, en el que habrá que cubrir 100.000 puestos de trabajo. Esta es una materia sensible en el ámbito sindical y CCOO ha hecho un especial hincapié en contar con espacios de negociación específicos para abordar la relación entre la formación y el acceso al empleo de calidad. El pasado verano, Gobierno Vasco, con cuatro consejeras a la cabeza -Desarrollo Económico, Educación, Empleo y Trabajo-, patronal y CCOO y UGT cerraban un acuerdo orientado precisamente a mantener un foro de diálogo permanente sobre empleo y formación. Ese espacio no ha tenido el recorrido que se pretendía en un primer momento y por ahora queda suspendido con la decisión de CCOO.

La secretaria general de CCOO de Euskadi, Loli García, denunció la actitud “deseal” del Gobierno Vasco y la patronal al firmar un acuerdo de colaboración en esta materia al margen de los cauces de diálogo social establecidos, decisión que a su juicio tiene “extrema gravedad”. “El Gobierno Vasco ha roto el ya precario equilibrio entre patronales y sindicatos en la negociación colectiva. Es algo que no vamos a permitir”, advirtió la sindicalista de Barakaldo.

Según la central vasca, el acuerdo entre Lakua y Confebask recoge únicamente medidas que interesan a las empresas en el campo de la formación y advirtió de que dicho pacto va a marcar “un antes y un después” en las relaciones entre el sindicato y el Gobierno y la patronal.

UGT-Euskadi, por su parte, indicó que valorará la semana que viene si opta por dejar las mesas de diálogo social, aunque sí avanzó su malestar por el acuerdo firmado entre el Gobierno Vasco y la patronal. En todo caso, parece difícil que pueda sostenerse un marco de negociación social únicamente con la cuarta central sindical de la CAV por cuota de representación.

“No es comprensible” El Gobierno Vasco indicó que “lamenta profundamente y nos resulta incomprensible” la decisión de CCOO de abandonar el diálogo social. “No es comprensible que un acuerdo-marco proveniente de un estudio de una organización, cuyo objetivo persigue dar mejor respuesta a las necesidades de empleo que van a plantear las propias empresas vascas hasta 2020, provoque esta decisión”, según fuentes de Lakua.

El Gobierno Vasco lamentó que un acuerdo que “es en sí mismo necesario y positivo, sea interpretado como un ataque al diálogo social” y fundamente una decisión por parte de CCOO “sin haber dado opción a escuchar las explicaciones propias”.

“Manifestamos, de nuevo, el carácter abierto del acuerdo-marco al que en el futuro es posible que se sumen iniciativas e integrantes”, propuso el Gobierno Vasco, que mostró su disposición de trasladar el acuerdo con Confebask a un foro de trabajo específico en la mesa de diálogo social.

La patronal Confebask, por su parte, mostró su “sorpresa” por el anuncio de CCOO, sindicato al que pidió que “reconsidere” su decisión. En una nota, Confebask mostró su intención de continuar en los espacios de diálogo social y destacó que el acuerdo del pasado lunes “no va contra nadie” ni establece “ningún tipo de veto a la participación de todos los agentes sociales”.

LAB indicó, por su parte, que la mesa de diálogo social “nació muerta” y ayer fue “enterrada” tras la decisión de CCOO. A juicio de esta central, el acuerdo entre el Gobierno Vasco y Confebask demuestra que “ya no necesitan sindicatos dóciles para conseguir sus objetivos”.