GASTEIZ - La compañía eléctrica vasca Iberdrola quiere seguir mejorando su rentabilidad, con el consiguiente efecto positivo para todos sus grupos de interés, desde los trabajadores a los accionistas, pasando por sus proveedores, clientes y sociedades en las que está presente. Con esa finalidad ha puesto en marcha un nuevo plan estratégico que contempla importantes inversiones en el mundo en el periodo 2018-2022. Fruto de esa mayor actividad económica se prevé que el País Vasco obtenga un retorno del orden de los 10.000 millones de euros.

Esta es una de las informaciones que transmitió el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán -que está dispuesto a seguir hasta 2023-, al lehendakari, Iñigo Urkullu, en la sede de Lehendakaritza en Gasteiz, en el transcurso del tradicional encuentro que mantienen en vísperas de la junta de accionistas.

Galán explicó, con cifras en la mano, el importante compromiso que mantiene la compañía con el País Vasco pese a que su expansión internacional de los últimos años haya desplazado al extranjero el grueso de las inversiones

En este sentido, Ignacio Galán, desgranó al lehendakari las líneas maestras del nuevo plan estratégico de Iberdrola y le expuso que los 10.000 millones de euros de contribución económica a Euskadi en el periodo 2018-2022, incluyen tanto los salarios y la contribución fiscal, como los cerca de 4.000 millones de euros que, según las previsiones, comprará la eléctrica a proveedores vascos, así como los cerca de 1.300 millones de euros que repartirá en dividendos a las decenas de miles de accionistas vascos de la empresa.

El máximo responsable de Iberdrola también comunicó al lehendakari Urkullu los resultados de la compañía en 2017, indicando que el impacto económico de la actividad desarrollada por la empresa, que tiene entre sus accionistas principales a Kutxabank, en la CAV ascendió más de 1.600 millones de euros

En su papel de empresa tractora, tal y como recordó ayer la consejera vasca de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia desde Londres, Iberdrola compró bienes y servicios a cerca de un millar de compañías vascas por importe de 750 millones de euros en 2017.

Por último, Galán hizo referencia al marco de colaboración existente entre la empresa y el Gobierno vasco para impulsar la digitalización de la red eléctrica del País Vasco, así como las colaboraciones en I+D con los centros vascos.

Proveedores. La eléctrica cuenta con un millar de empresas proveedoras en el País Vasco a las que el pasado año compró bienes y servicios por importe de 750 millones de euros.

Compras. La compañía contempla en el plan estratégico 2018-2022 adquirir cuatro mil millones de euros en bienes a firmas vascas.

Contribución. La actividad en 2018-2022 aportará a la CAV un 25% más.