BILBAO - Los tiempos en los que Iberdrola compraba compañías como Scottish Power o Energy East han pasado a la historia, al menos en los próximos cinco años del plan estratégico 2018-2022, pues según Ignacio Galán, la eléctrica no contempla realizar operaciones corporativas. Salvo que se encontraran oportunidades como la de Avangrid, en EEUU, o la fusión de Elektro y Neoenergia, en Brasil, el grupo no prevé comprar otras sociedades.
Sin embargo Iberdrola invertirá 32.000 millones de euros entre 2018 y 2022, lo que le permitirá sentar las bases para un crecimiento sostenible futuro y alcanzar al cierre del ejercicio de 2022 un beneficio neto de al menos 3.500 millones de euros.
Más del 90% de las inversiones previstas para dicho periodo se destinará a los negocios de Redes (50%), cuya cifra ascenderá a unos 15.500 millones de euros; Renovables (37%, unos 11.500 millones de euros) y Generación contratada en México (4%, unos 1.400 millones de euros), áreas que aportarán más del 80% del resultado bruto de explotación (Ebitda) en 2022.
El resultado bruto o Ebitda del grupo eléctrico vasco en el horizonte de 2022 se prevé que alcance los 11.500 millones de euros. El grupo, cada vez más internacionalizado, espera que un 35% del Ebitda en el año 2022 se genere en euros, un 29% en dólares, un 20% en libras esterlinas y el restante 16% en reales brasileños
Iberdrola sí contempla rotar su cartera de activos hasta en 3.000 millones aunque no aclaró si la participación en Gamesa del 8% podría verse afectada. - X.A.