madrid - Las empresas industriales instaladas en Euskadi están sujetas a una tarifa eléctrica más cara que las de la mayoría de las CCAA por no disponer -por razones históricas de cuando se creó la red eléctrica en el siglo pasado- de otra opción que el acceso a la alta tensión suministrada en 30 Kv, con un peaje más caro que el acceso a 25 Kv de buena parte del Estado, por ello el PNV exige el cumplimiento del pacto alcanzado con el Gobierno del PP para rebajar los peajes en dichas conexiones, solución que beneficiaría a las empresas vascas pero también a un buen número de firmas españoles, principalmente, en la Cornisa Cantábrica. El pacto está incumplido por el Ejecutivo de Rajoy que lo supedita al apoyo nacionalista a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018.
En esta tesitura, el PNV reiteró ayer su exigencia al Gobierno del PP de que “cumpla lo pactado” y aplique la nueva tarifa eléctrica a las empresas vascas en este 2018, sin supeditarla a otros planteamientos políticos esgrimidos ayer en Euskadi por el ministro de Energía, Álvaro Nadal.
Como se recordará el Ejecutivo de Rajoy se comprometió en su día a eliminar la tarifa eléctrica de alta tensión denominada 6.1.b y a englobar las tensiones de 30 a 36 kilovoltios en la tarifa 6.2 en el año 2018, dentro del acuerdo alcanzado con la formación jeltzale para el apoyo a los Presupuestos de 2017.
Las grandes empresas industriales instaladas en Euskadi están sujetas a una tarifa más cara que la de la mayoría de CCAA del Estado por el mero hecho de estar conectadas, es lo que hay, a la alta tensión de 30 Kv mientras que las de Catalunya pagan menos peajes porque su conexión es a menos de 25 Kv.
Según el pacto, la tarifa acordada por PNV y PP se debería haber aplicado desde el 1 de enero de 2018 a unas 1.250 empresas del conjunto del Estado, de ellas unas 800 vascas.
El debate resurgió ayer cuando el ministro de Energía y Turismo, Álvaro Nadal -que firmó ayer en Bilbao un convenio con el consejero vasco de Turismo, Alfredo Retortillo, para la celebración del consejo ejecutivo de la OMT en Euskadi-, señaló que la materialización de la aplicación de la nueva tarifa requiere que 2018 cuente con unos PGE y advirtió que el recurso catalán en Bruselas contra la rebaja de peajes no ayuda.
Fuentes del PNV señalaron que si hay voluntad política se puede habilitar una solución independientemente de un hipotético acuerdo presupuestario. Para la representación jeltzale la realidad es que el PP está incumpliendo el pacto y eso lo están pagando las empresas industriales. Aplicar la tarifa pactada, según recuerda el PNV, no solo es positivo para las empresas vascas sino para todas las del Estado que están conectadas a una red de esas características y que tiene un factor de competitividad en contra en estos momentos. Por ello, el PNV emplaza al Gobierno Rajoy a que “cumpla lo acordado” y recuerda que no se ha negociado nada de los PGE 2018 con el PP porque la falta de normalización política en Catalunya, con la aplicación del artículo 155, no permite entablar negociaciones.