bILBAO - El balance anual de Kutxabank es uno de los espejos más fiables en los que puede mirarse la economía vasca y, a la espera de que se destape a finales de este mes todas las piezas del ejercicio, las que se están conociendo refuerzan la sensación de que el año pasado fue el de la consolidación de la recuperación. Llega el momento de mirar al frente y el dinamismo de la actividad empresarial permitió al banco de las tres antiguas cajas de ahorro conceder más de 3.400 millones de euros en créditos a pymes en 2017, casi un tercio más que en el curso anterior.
Es un ritmo similar al que se ha registrado en los préstamos al consumo de los hogares y se ha cerrado la puerta definitivamente a la recesión. Esa es la lectura que hizo ayer Kutxabank, que a la vista de los “buenos datos”, estima que “el entramado productivo y empresarial ha salido definitivamente de la crisis”, y confía en que “la consolidación y el crecimiento se mantengan en 2018”.
Lo más destacable es que la actividad crediticia mejora en todos los frentes: inversiones productivas, actuaciones en mercados exteriores y financiación de circulante ligado al crecimiento de las ventas. Una circunstancia que se produce en un entorno de “consolidación del mercado económico y empresarial, con un sensible descenso de los activos dudosos y una clara mejora de la situación de las pequeñas y medianas empresas” explicó el banco.
El salto respecto a 2016, cuando los préstamos empresariales crecieron un 10%, es “muy importante”. Además se encadenan ya tres años de incremento en el capítulo del respaldo a las inversiones productivas, las que generan riqueza y empleo.
Las expectativas son positivas porque no solo se está produciendo una mejora gradual año a año, también se eleva el ritmo al comparar un trimestre con el precedente. Así, entre octubre y diciembre se formalizaron casi un tercio de los créditos suscritos en el conjunto del año. Ese dato coincide con el repunte de la producción industrial en el último tramo de 2017, cuando se cerró el mejor diciembre en 11 años para la actividad en las fábricas. La financiación está en la trastienda de ese dinamismo y los números del banco vasco retratan esa nueva realidad.
De este modo, la cuarta edición del plan Makina Berria de Kutxabank para la renovación de la capacidad productiva de las empresas vascas, acordado con las asociaciones empresariales de Euskadi, volvió a ser el año pasado una de las “palancas decisivas para la consecución de los buenos resultados” crediticios de Kutxabank. Además, el banco destacó que el “importante” crecimiento de la inversión empresarial en 2017 se produjo tanto en activo fijo como en circulante, con un destacado incremento del 12% en descuento comercial y del 9% en comercio exterior.
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Kutxabank concedió el año pasado créditos a pymes por valor de más de 3.400 millones de euros. El saldo aumentó en un 29%, con repuntes en todas las líneas de financiación ligadas a la actividad empresarial.
