BILBAO. El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, "Txiki", y el responsable de negociación colectiva del sindicato, Peio Igeregi, han presentado hoy en Bilbao las prioridades de la central en la negociación de los convenios este año, entre las que se encuentra el logro de medidas concretas para hacer frente a la precariedad laboral.

Incrementos salariales y creación de empleo acordes con el crecimiento económico, un sueldo mínimo de 1.200 euros en todos los convenios, recuperación del poder adquisitivo perdido y garantías de aplicación de los acuerdos que se firmen son otras de las reivindicaciones principales del ELA.

Para lograr esas reivindicaciones "el nivel de conflictividad es imprescindible que sea mayor", ha avisado Igeregi, quien ha afirmado que ELA no va a hacer "sindicalismo de bolígrafo".

"ELA reivindica el papel del conflicto en una sociedad" que es "conflictiva e injusta", ha indicado "Txiki" Muñoz, quien ha denunciado que las últimas reformas laborales han consolidado "un mercado precario y de negociación colectiva más débil".

Se trata, según ha dicho, de una situación en la que la patronal ve la precariedad como "un tesoro" y en la que "la foto" resultante es su "negativa a negociar".

En este contexto, ha señalado que ELA va a trabajar por organizar a quienes sufren precariedad laboral para que "se defiendan" y ha puesto de manifiesto que "el poder económico y el Gobierno vasco no quieren" que el sindicato represente ese papel.

El sindicalista ha vuelto a ser muy crítico con las políticas de las instituciones vascas y, en referencia al reciente y largo conflicto laboral en las residencias concertadas de Bizkaia, ha acusado a los poderes políticos de ser "hipócritas" porque "la precariedad con cara de mujer la imponen ellos".

"¿Hacen falta 370 días de huelga para lograr un salario digno de 1.200 euros?", se ha preguntado, en este sentido, en alusión al conflicto citado.

Ante esta situación, el responsable de ELA ha recomendado al Gobierno vasco que "tenga cuidado de no caer en la tentación de dar más poder a quien más tiene y poner sus instrumentos al servicio del debilitamiento de las organizaciones sindicales que están haciendo este trabajo".