gasteiz ? El consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu, apeló ayer a la “responsabilidad” de los grupos de la oposición para lograr un acuerdo “lo más amplio posible” que permita sacar adelante el proyecto de Presupuestos de 2018, unas Cuentas que calificó como “buenas”, “bien orientadas” y que responden a las necesidades de la ciudadanía vasca.
Azpiazu compareció ayer en comisión en el Parlamento Vasco para desgranar las líneas generales del proyecto de Ley de Presupuestos para 2018 aprobado por el Gobierno de Iñigo Urkullu el pasado octubre, que ascienden a 11.486 millones de euros, 426,7 millones más que en 2017, lo que supone un incremento del 3,9%. Los dos partidos que sustentan al Gobierno Vasco, PNV y PSE, carecen de mayoría en la Cámara vasca para sacar adelante estas Cuentas. De hecho, las de este año se aprobaron gracias a un acuerdo con el PP que se abstuvo en la votación. Ante esta situación, el consejero volvió a apelar a la “responsabilidad” de los partidos de la oposición ante un proyecto que “puede ser insuficiente” pero que, insistió, es bueno para la ciudadanía. Azpiazu reiteró a todos los grupos de la oposición, como ya hiciera durante la presentación en Consejo de Gobierno del proyecto, que el Ejecutivo vasco quiere “negociar, pactar y aprobar” las Cuentas en los plazos previstos y manifestó que el acuerdo logrado con el PP ha “funcionado estupendamente”. En este sentido opinó que “no tiene por qué no haber otro acuerdo que funciones igual de bien”.
Advirtió, eso sí, de que no tener presupuesto el próximo año y tener que prorrogar el actual provocaría un “problema de gestión y político” a considerar, pero también impediría hacer las nuevas inversiones previstas, subir el 1,5% el sueldo a los funcionarios, llevar a cabo las aportaciones a Itzarri, incrementar las dotaciones de la Renta de Garantía y otros “perjuicios” más. La apelación a la búsqueda de acuerdos fue reiterada por las parlamentarias del PNV y el PSE-EE, Josune Gorospe y Susana Corcuera, respectivamente. Gorospe pidió dejar a un lado “vetos absurdos”, aportar en constructivo y no “tumbar” unas Cuentas por intereses que escapan de lo que preocupa a la ciudadanía.
la venda y la herida Al respecto, Antón Damborenea (PP) aseguró que su partido sigue dispuesto a negociar y a llegar a acuerdos, negando que se haya puesto ningún veto. Así, dijo tener la sensación de que “alguien se está poniendo la venda antes que la herida” y que se les quiere echar la “culpa” de no contar con presupuesto.
Leire Pinedo (EH Bildu), por su parte, respondió que su formación siempre ha actuado con responsabilidad, pero dejó claro que existen mecanismos para trabajar con unos Presupuestos prorrogados con más dotación que los anteriores e insistió en que el proyecto presentado sigue teniendo una carencia de partida primordial en los ingresos. En esta línea, Julen Bollain (Elkarrekin Podemos) calificó de “catastrofista” la visión de Azpiazu de unas Cuentas prorrogadas cuando todavía no han empezado las negociaciones pero reconoció que existe “poco margen” para influir en unos Presupuestos que en su opinión precisan de unos ingresos mayores.
Durante su comparecencia, Azpiazu precisó que el aumento de la recaudación y el acuerdo en la Comisión Mixta de Concierto permitirán en 2018 contar con un presupuesto “más holgado” que el que se plantea “estrictamente” en el proyecto. ? Efe