gasteiz - El PNV y el PSE alcanzaron ayer un acuerdo para modificar las normas tributarias de las tres diputaciones, sustanciadas en pequeñas modificaciones en el IRPF y Sociedades. En el impuesto sobre la Renta se plantean “ligeros” cambios que no afectarían a la mayoría de los contribuyentes. Además, se propone “actualizar” el marco fiscal de las empresas para que, sin dejar de ser “una referencia atractiva para la inversión”, contribuya a “fomentar la creación de empleo de calidad”. Como consecuencia se endurecerán las condiciones de acceso a las deducciones. Los retoques también buscan “garantizar” que las administraciones vascas dispongan de “los recursos necesarios para el sostenimiento de los servicios públicos”.
Tras varios meses de debate y negociación, los dos partidos que sostienen el Gobierno Vasco y las tres diputaciones, dan por cerrado el proceso de revisión del marco tributario aprobado en 2013. A partir de ahora se inicia la tramitación en Juntas, donde será necesario buscar el apoyo de un tercer partido en Araba.
El conjunto de los cambios que se introducen no se conocerá hasta mañana jueves, cuando las diputaciones publicarán sus respectivos proyectos en el portal de transparencia. Habrá variaciones en función de las características de cada territorio, respetando eso sí el principio de armonización fiscal.
De hecho se refuerza la confluencia de los marcos fiscales, ya que Gipuzkoa recuperará el denominado escudo fiscal, el límite que impide que los impuestos (IRPF más Patrimonio) que paga un contribuyente a Hacienda superen un porcentaje establecido de sus ingresos anuales. Se trataba del mayor desequilibrio fiscal interterritorial y ahora se corrige situándolo en el 65%, en línea con Araba y Bizkaia. Además, dejará de ser el Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas y pasará a denominarse Impuesto sobre el Patrimonio. Se entierra de esta forma una de las banderas que levantó EH Bildu cuando estuvo al frente de la Diputación guipuzcoana.
Respecto a otras modificaciones, el Impuesto sobre Sociedades mantendrá el tipo nominal en el 28% pero se revisarán sus deducciones para evitar prácticas de ingeniería fiscal que reducen la factura de Hacienda sin un compromiso real con la filosofía de las bonificaciones. Así, para acceder las deducciones por la creación de empleo los puestos de trabajo creados tendrán que tener un sueldo equivalente al menos al 175% del salario mínimo, y además los empleos tendrán que durar al menos dos años. Respecto a las deducciones por las inversiones en I+D+i, con carácter general se limitan ahora a las empresas nuevas relacionadas con la innovación.