BILBAO. La entidad vasca ha fijado el incremento para este año en el 2,9, una décima inferior a la de 2016, y sitúa la tasa de paro en el 11%. Para 2018 su estimación rebaja la previsión en otras dos décimas, hasta el 2,7.
El informe constata que la economía vasca acumula 14 trimestres consecutivos de crecimiento. La última tasa trimestral registrada es del 0,7% y la tasa anual se encuentra en el 2,9%.
El responsable del departamento de Estudios de Laboral Kutxa, Joseba Madariaga, ha alertado, sin embargo, de que esas tasas de crecimiento, tanto de la economía vasca como de la española, superan "con holgura" y están "claramente" por encima de su potencial real y se han debido principalmente a la presencia de "vientos de cola" y factores "exógenos" registrados durante el último trienio, como "la política monetaria del Banco Central Europeo, los bajos precios de las materias primas y la fuerte demanda interna".
Para Madariaga, habrá en los próximos años una corrección "a la baja" de esas tasas de crecimiento actuales que estarán más acordes con la productividad y la población activa y estarán más cerca del 2% que del 3% actual".
Por ese motivo, el director de Estudios cree conveniente que las economías vasca y española aprovechen la buena coyuntura actual para reducir su elevado volumen de deuda antes de que llegue el próximo ciclo de recesión y así "mejorar su productividad". "Hay que tratar de ir reduciendo ese importante volumen de deuda", ha aconsejado.
INCERTIDUMBRE
El análisis de la entidad vasca considera, sin embargo, que esa evolución de la economía vasca tampoco debe olvidar elementos de "incertidumbre", como el desarrollo de las negociaciones del Brexit para poder calibrar mejor los efectos de la decisión británica, la orientación de la política fiscal y comercial de Estados Unidos, el resultado de las elecciones alemanas de otoño y los desequilibrios financieros de la economía china.
Madariaga no se ha mostrado "optimista" con que las posibles subidas salariales de las que se está hablando, tanto en círculos políticos como empresariales, vayan a ser "significativas". "Van a subir pero será de manera contenida por el comportamiento de los precios y porque todavía la tasa de paro es elevada", ha matizado.
Desde su punto de vista, transcurridos los peores años de la crisis en Euskadi, 2012 y 2013, "ha llegado el momento de que la visión de las empresas sea distinta y se liguen los salarios a la productividad", ha señalado.
En cuanto al comportamiento de la industria vasca en los últimos ejercicios, el informe ha constatado un comportamiento "positivo" que han reflejado la mejoría y fortaleza que ha mostrado el sector tras la salida de la crisis combinado con una disminución del peso de los costes de personal.
En ese sentido, mientras la evolución de la producción ha arrojado índices razonables en el sector electrónico-informático, automoción o herramienta, muestra un comportamiento "dispar" y descendente en construcción naval, siderurgia y cemento.
Respecto al actual ejercicio, Madariaga ha indicado que este 2017 se cerrará con una cierta "sincronía" en el crecimiento mundial y el alejamiento del riesgo de deflación por el repunte del precio del petróleo y de las materias primas detectado a finales del año pasado.
MEJORAN LAS TASAS DE PARO
El director de desarrollo de Negocio de la entidad, Xabier Egibar, ha calificado el ejercicio 2016 en su intervención como "un buen año" para la economía vasca, que registró un crecimiento "sólido" del 3,1% de su PIB, y una tasa de creación de empleo del 2,9%, con una reducción de la tasa de paro de 2,2 puntos hasta el 12,6%.
Los elementos que a juicio de la entidad se encuentran detrás de este comportamiento han sido "el proceso de devaluación interna de la economía y factores coyunturales como la política monetaria europea y el bajo precio de las materias primas".
Egibar, que ha destacado el comportamiento en cuanto a creación de empleo, ha señalado que "poco a poco las tasas de paro comienzan a ceder el terreno ganado a lo largo de esta prolongada crisis, aunque todavía distan mucho de valores que podrían considerarse aceptables". Asimismo ha destacado que, "por primera vez" en los últimos años, "todos los sectores marcan registros de crecimiento positivos del valor añadido bruto".
El informe concluye que si bien las cifras actuales garantizan a corto plazo, "sensibles avances en el proceso de convergencia hacia los países con mayor nivel de vida", los retos a medio plazo no son menos importantes, entre los que cita "la mejora de la productividad de la economía y encarar los problemas derivados del envejecimiento de la población".