bilbao - ELA dio inicio ayer a su XIV Congreso con la presentación del informe de gestión de la actual ejecutiva, que fue aprobado de forma unánime por los más de 700 delegados presentes en el Palacio Euskalduna. El discurso del secretario general, Adolfo Txiki Muñoz, quien revalida hoy su cargo para cuatro años más, mantuvo la línea de sus últimas intervenciones con duras críticas al Gobierno Vasco. “No quieren que ELA hable de política. Por ahí no vamos a pasar. Vamos a tener más perspectiva política que nunca”, afirmó Muñoz, que apostó por un sindicalismo que sea la “resistencia” ante el “monólogo neoliberal”. “Resistimos mientras otros, en la política y en el sindicalismo, se dejan llevar”, afirmó ante un auditorio en el que destacaban las camisetas de apoyo a las trabajadoras de las residencias vizcaínas.

La referencia a este conflicto por parte del secretario general de ELA arrancó una de las grandes ovaciones del día. Tras los gritos de erresiden-tziak borrokan!, Muñoz puso de ejemplo a estas trabajadoras y denunció que la Diputación y las empresas “desprecian” las condiciones de trabajo de las mujeres. “Solo les ha preocupado que los servicios mínimos anulen el efecto de la huelga”, dijo.

La sesión de ayer, que comenzó con un breve recuerdo del fallecido Patxi Agirrezabala, contó con la presencia de numerosos invitados de otras organizaciones sindicales y políticas. Entre ellos estuvieron los líderes de LAB, Garbiñe Aranburu, y de UGT-Euskadi, Raúl Arza, pero no la recién elegida secretaria general de CCOO-Euskadi, Loli García, central que envió de representantes a Juan Carlos Martínez y Oskar Arenas.

Tampoco estuvo el líder del PNV, Andoni Ortuzar, partido al que representaron Iñaki Chueca y Jon Andoni Atutxa. Desde el ámbito político también estuvieron Podemos y EH Bildu mientras que no hubo representación de PP ni PSE. Asimismo, hubo presencia de organizaciones sindicales de Catalunya, Escocia, Quebec, Sáhara, Palestina, Portugal o Argentina.

precariedad Muñoz remarcó que “la necesidad del sindicalismo es mayor que nunca” y defendió que el sindicato “debe ser cada vez más político”. “La precariedad no es un fenómeno meteorológico. Es una decisión de administración y empresarios”.

El sindicalista alavés apostó también por reforzar la alianza con LAB, aunque remarcó que debe haber unidad también en la acción sindical para que las empresas “no sean un espacio de competencia” entre sindicatos. “La precariedad no se va a resolver con un acuerdo político. Debe ser combatida con lucha”, recalcó en alusión velada a los amagos que ha protagonizado LAB en los últimos años cara a participar en negociaciones con el resto de agentes sociales.

En general, Muñoz dejó claro ayer que su tercer mandato no va a suponer un cambio en la línea de actuación del sindicato. La central abertzale aspira a mantenerse como sindicato de “resistencia” ante “la globalización neoliberal”. “Hay dos modelos: el de quienes se dejan llevar y el de los que optan por resistir. Nosotros somos de este segundo grupo”, aseveró el líder de ELA antes de criticar los procesos de diálogo social de la CAV en los que sí han estado CCOO y UGT. “No hay nada en el diálogo social. Es un monólogo neoliberal”, dijo.

En cuanto a la relación con el Gobierno de Iñigo Urkullu, Muñoz hizo un repaso de los enfrentamientos de los últimos años, como el acuerdo con la minoría sindical sobre convenios o el documento sobre relaciones laborales “en el que se decía expresamente el papel que corresponde a los sindicatos”. “No quieren que haya defensa colectiva. Quieren relaciones clientelares pero con ELA no lo van a conseguir”, afirmó entre aplausos de los delegados.

El discurso de Muñoz incluyó referencias a la fiscalidad, a la relación entre Gasteiz y Madrid -“lo único bilateral es la aplicación de recortes”, dijo- y también a la nueva situación política en Nafarroa con el Gobierno de Uxue Barkos. Aunque también es crítico con sus políticas, la relación de ELA con la presidenta de la Comunidad Foral es menos tensa. “Nunca nos ha exigido que cesemos en las críticas a su Gobierno”, apuntó Muñoz.