Bogotá - El lehendakari pidió ayer a las empresas vascas que aprovechen la puerta que abre la paz en Colombia para buscar oportunidades de negocio en la cuarta economía de Latinoamérica. Durante la apertura en Bogotá de unas jornadas de trabajo entre compañías vascas y colombianas, en el que también participaron agentes públicos locales de desarrollo económico, Iñigo Urkullu aseguró que “la paz es un activo” para el tejido productivo de ambos países, que viven una nueva etapa tras décadas de violencia.
En el primer acto de su viaje a Colombia, el lehendakari recordó que las previsiones de crecimiento de este año son similares para la economía vasca y la colombiana, en la franja de entre el 2,5% y el 2,7%, y que comparten intereses comerciales en las áreas de la energía, el medio ambiente o la construcción de infraestructuras.
Se dan las condiciones para estrechar lazos económicos y para engrasar esas dinámicas está vigente un acuerdo de colaboración del Gobierno Vasco con el colombiano y se firmará un segundo durante este viaje con el Departamento de Cundinamarca, el principal motor económico del país y donde se ubica la capital, Bogotá. En el plano institucional, estuvo presente en las jornadas Claudia Bedoya, gerente del Programa de Transformación Productiva (PTP) de Colombia, la alianza estratégica entre el Estado, la Universidad y los empresarios para el impulso de la competitividad. También el vicepresidente de Inversión de Procolombia, Ancizar Guerrero, y la Ejecutiva de Políticas y Proyectos Estratégicos de INNpulsa, Claudia Avellaneda.
El proceso de desarme, a pesar de que los plazos no se están cumpliendo, alienta el optimismo dentro del Gobierno colombiano, cuyos representantes destacaron la reforma fiscal que está diseñando y que profundizará en las ventajas a la inversión.
El lehendakari quiso “apoyar” y “reconocer el esfuerzo” que se está realizando en el país sudamericano de cara a que culmine con éxito la pacificación de Colombia y realizó un paralelismo con el “proceso de paz y convivencia” de Euskadi. “Nuestras historias y realidades son muy diferentes. No admiten comparación; pero precisamente por lo sufrido y lo padecido, la mayoría del pueblo vasco está con el pueblo de Colombia en el inicio de esta nueva etapa”, dijo.
La paz, añadió, “permite desplegar en sentido productivo las energías” que han estado “retenidas” como consecuencia “del miedo y la violencia”.
Ese escenario ha dejado paso a otro de “esperanza y optimismo” que representa una “oportunidad de futuro” para los dos países, destacó Urkullu. De cara precisamente a aprovechar el clima favorable y promover la colaboración entre empresas, Euskadi y Colombia firmaron el año pasado el acuerdo para el desarrollo empresarial. Los agentes que catalizan este memorando de entendimiento son la agencia industrial vasca, Spri, y el PTP, lo que permite que las sinergias estén muy pegadas al ambicioso objetivo de estímulo de la competitividad en el país sudamericano.
El lehendakari puso en valor la experiencia de la colaboración público-privada en la CAV como resorte de la economía de y la labor de acompañamiento del Gobierno Vasco a las empresas en sus procesos de expansión exterior. Una estrategía basada “en cuatro ies, industria, inversión, innovación e internacionalización”.