Vitoria - La digitalización como herramienta para agilizar las compras es una realidad creciente y el comercio tradicional tiene que afrontar el hecho de que internet ha hecho realidad la ventanilla única y ha simplificado la relación entre empresas y consumidores. Esa dinámica de realizar las compras a través de la red está haciendo que las cotas del comercio electrónico crezcan a tasas de más de dos dígitos, muy superiores a las comercio tradicional, pero pese a ello una mayoría de vascos, en concreto 6 de cada 10, prefieren comprar en tiendas físicas antes que hacerlo en comercios online.

Parece claro que en asuntos como la alimentación los consumidores vascos prefieren claramente ver los productos y saber donde los adquieran.

Los productos de alimentación, en el 96% de los casos son adquiridos in situ, el calzado, -zapatillas deportivas -, y el vestido también es comprado en tiendas físicas por el 68% de los consumidores vascos son los productos mas populares para comprar en las tiendas de forma presencial. En cambio, la electrónica (40%) y los regalos (32%), incluidos los libros, son los productos que más se suelen comprar on line.

Estas son unas de las conclusiones del estudio realizado por Tyco, empresa líder mundial en soluciones de seguridad y rendimiento para el comercio detallista, en el que se analizan los aspectos que más valoran los vascos a la hora de ir de compras.

Por supuesto, el precio se ha convertido en un elemento fundamental en las decisiones de compra de los ciudadanos vascos. Así no es sorprendente que lo que más valoran de un comercio es que tenga buenos precios y ofertas, 80%. Respecto a la atención de los dependientes, el 60% de los encuestados prefiere que los trabajadores se mantengan apartados, pero estén disponibles cuando se les necesite. Por otra parte, el 24% de los consumidores reconoce que abandona la tienda sin comprar cuando hay mucha cola en la caja para abonar una hipotética compra. El 20% también deja la tienda cuando hay cola en los probadores.

Poder tocar los productos es un aspecto diferenciador del comercio tradicional que es valorada por buena parte de los consumidores vascos. De hecho, el 88% de los encuestados destaca que la principal motivación que encuentran para realizar sus compras en tiendas físicas es la posibilidad de poder probar, tocar y elegir los productos. Curiosamente, solo el 8% valora el trato personal que ofrece el comercio tradicional.

Respecto al comercio on line a través de internet, el 68% de los encuestados destaca como elemento distintivo que es más cómodo y rápido. Además, al 28% de los encuestados no le duelen prendas en reconocer que suele mirar los productos en las tiendas tradicionales aunque finalmente haga la compra en una página web.

Precisamente porque los consumidores que acuden a las tiendas tradicionales valoran el poder tocar y sentir un producto concreto, al 68% de los vascos les molesta que los productos se encuentren protegidos en vitrinas y no pueda acceder a ellos fácilmente.

Por este motivo, los sistemas de protección electrónica de artículos (EAS), las alarmas antihurto duras o adhesivas, siguen siendo el método más efectivo y menos intrusivo para proteger los productos en las tiendas.

Comercio on line Pese al que todavía seis de cada diez consumidores vascos optan por acudir a las tiendas tradicionales es un realidad que el comercio electrónico por internet sigue creciendo y por encima de la media del sector. Este año está previsto que el comercio on line crezca un 8%, según Adecco, que recuerda que ello está produciendo, entre otros efectos, que se dispare la demanda de trabajadores en el sector de logística y transporte.

Es una realidad que el denominado e-commerce está produciendo una auténtica revolución en el consumo, al hacer posible que un consumidor pueda adquirir bienes y servicios desde cualquier lugar del mundo con conexión a internet.

Por su comodidad, la venta electrónica es cada vez más atractiva para el consumidor, en especial para las generaciones más jóvenes, y sus fuertes tasas de crecimiento, más altas que la media del sector, -recuérdese, por ejemplo, que el comercio minorista vasco ha crecido sólo un 0,1% en el primer trimestre de este año, según datos del Eustat-, ha planteado importantes retos a las empresas que han tenido que adaptar sus estructuras a esta nueva modalidad.

Incluso grandes grupos de la distribución comercial como el actual líder en España, Mercadona, ha reconocido en palabras de su propio presidente Juan Roig que el portal de ventas por internet de la compañía es claramente mejorable.

El grupo vasco Eroski, pionero en el negocio on line en el sector de alimentación desde hace más de quince años, ha lanzado días pasados un nuevo supermercado on line con 15.000 referencias y en el que se puede operar desde cualquier dispositivo electrónico sin necesidad de descargar una APP.

De hecho, el Estado español se ha convertido en el cuarto país en el ranking europeo por el volumen de la venta electrónica y lleva años creciendo a doble dígito: en el tercer trimestre de 2016 se incrementó un 16,3% interanual, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), hasta alcanzar una facturación de 6.166 millones de euros. En el presente 2017, las previsiones indican que el citado comercio electrónico crecerá al menos un 8% con respecto al año pasado.

El informe Total Retail 2017 de PWC señala que aunque la tienda física sigue siendo la preferida para hacer las compras, el número de ciudadanos del Estado que ya compran por internet al menos una vez a la semana ha subido del 19 al 27% y los que al menos una vez al mes acuden a un portal comercial llega al 58%.