GAsteiz - El presidente del Consejo de Relaciones Laborales (CRL), Tomás Arrieta, indicó ayer que, aunque la situación de la negociación colectiva vasca “no es la que nos gustaría”, observa que “hay puntos de luz que tienen que ver con el acuerdo de enero”, señaló. En ese sentido, Arrieta indicó que tras el paso “imprescindible” que supuso el blindaje de los convenios vascos, se han abierto mesas y hay “actividad negociadora real”.

El presidente del CRL señaló en una entrevista en la radio pública vasca que el acuerdo de enero para blindar los convenios “debe ser valorado en su justa medida ya que por sí solo no representa un avance, aunque es una condición imprescindible”, remarcó. Aunque recordó que “ha pasado poco tiempo” desde que se logró ese histórico consenso entre la patronal y los cuatro sindicatos vascos, ya se han dado “algunos pasos positivos, el mejor que hay mesas de negociación abiertas”. “Hay una actividad negociadora real y espero que eso vaya cristalizando en acuerdos”, remarcó Arrieta en Radio Vitoria.

Respecto a los obstáculos que se encuentran los negociadores para avanzar en la firma de convenios, el presidente del organismo sociolaboral de la CAV hizo alusión a “un conjunto de factores”. “Estamos en un momento de evolución hacia un modelo de negociación colectiva más abierto”, indicó, aunque apuntó que “hay más proximidad en el diagnóstico de la que se pudiera percibir”, ya que tanto empresarios como sindicatos tienen interés en lograr consolidar un marco de relaciones laborales “estable”.

“Creo que la asignatura pendiente es construir un consenso sobre lo que es la competitividad de las empresas. La sostenibilidad no es un concepto exclusivo de los empresarios. A todos nos interesa que las empresas sean sostenibles”, recordó Arrieta, que consideró que para que una compañía sea competitiva “debe ser capaz de integrar e implicar a las personas y hacerles partícipes de esa riqueza”.

En cuanto a las condiciones de trabajo, Arrieta remarcó como en otras ocasiones que “hay que subir los salarios como regla general sabiendo que puede haber excepciones”. “Rozamos el 3% de crecimiento económico y hay que trasladar ese crecimiento de la riqueza a los salarios. De los salarios depende la sostenibilidad de la economía”, indicó, y recordó que el nuevo empleo presenta altos índices de temporalidad. “No somos capaces de descender del 25% de tasa de temporalidad y eso hay que corregirlo”, afirmó.

el 47%, menos de mil euros Según el sindicato de técnicos de Hacienda, Gestha, el 47% de los trabajadores del Estado español tenía en 2015 salarios por debajo del mileurismo, la proporción más alta desde que empezó la crisis. El informe también alerta de que, sin contar con otros ingresos familiares, casi 6 millones de trabajadores (un 34,4%) podrían encontrarse en riesgo de pobreza, al percibir un sueldo por debajo del Salario Mínimo Interprofesional.

Según la información recopilada por Gestha, en los últimos 8 años ha aumentado el porcentaje de trabajadores que no llegan a 1.000 euros de salario, pasando de suponer el 39,9% del total en 2007 a ese máximo del 47% en 2015, año de la última estadística disponible. - DNA