Azpiazu anuncia que los Presupuestos vascos es la antesala de "importantes hitos" fiscales y financieros

Ambas enmiendas, que se debaten este jueves en el pleno de la Cámara Vasca, serán rechazadas por el PNV y el PSE-EE (formaciones que conforman el Gobierno vasco) y el PP, que ha llegado a un acuerdo con el Ejecutivo para facilitar la aprobación de las Cuentas.

En su intervención, el consejero ha explicado que, en las conversaciones mantenidas con EH Bildu y Elkarrekin Podemos, se constató que no era posible una "convergencia real" con esas formaciones en materia presupuestaria.

Azpiazu ha señalado que en las sucesivas rondas de contacto con EH Bildu y con Elkarrekin Podemos, pudo comprobar que dichos grupos "se alejaban ostensiblemente" del Proyecto de Presupuestos. Según ha dicho, aunque esto no impedía que compartir el análisis de ciertas cuestiones, "las discrepancias políticas y económicas de concepto y de forma afectaban a elementos nucleares en los que se plasma la política del Gobierno".

"Sin duda, es totalmente legítimo y lógico que afloren esas diferencias, ya que responden al prisma ideológico y a la personalidad de cada grupo, y a la forma en que cada uno afronta el juego político. Simplemente, hemos llegado hasta un punto en el que no parecía posible una convergencia real", ha manifestado.

"ESFUERZO DE ACERCAMIENTO"

Por el contrario, ha destacado que, en el caso del Partido Popular, esta formación "no impugnaba los pilares" del modelo presupuestario del Gobierno, sino que planteaba "un diálogo dirigido a proponer puntos concretos que merecían ser reforzados", como los referidos a las políticas sobre el tejido económico, la pequeña y mediana empresa, las inversiones, o el apoyo a determinados servicios esenciales.

Además, ha subrayado que el Gobierno y el PP "hemos coincidido en la importancia de que Euskadi cuente con unos Presupuestos", lo que "merecía un esfuerzo de acercamiento".

Por ese motivo, ha explicado que aun desde la existencia de "notables diferencias políticas, ideológicas y económicas" entre ambas partes, se comprobó que "era posible compartir con el Partido Popular un diagnóstico del momento presupuestario y un compromiso para coadyuvar a reforzar algunas políticas públicas de interés".

Las aportaciones del PP a las Cuentas --que afectan a un 0,26 por ciento del volumen total del Presupuesto-- "no desvirtúan", según ha dicho, el Proyecto presentado por el Gobierno.

Azpiazu ha agradecido a todos los grupos la "predisposición" al diálogo y el acuerdo, pese a que, finalmente, sólo se ha llegado a un acuerdo con el PP. "Quiero poner en valor no solo el acuerdo sino, también el esfuerzo de la totalidad de las fuerzas políticas", ha indicado.

"TRANSICIÓN"

Pedro Azpiazu ha afirmado que pese a que las Cuentas de 2017 --las primeras de la legislatura-- pueden parecer "de transición" desde un punto de vista económico, "no resulta igual" desde una perspectiva política.

Esto, según ha dicho, se debe a que se trata de unos Presupuestos que nacen de un Ejecutivo de coalición, que tiene "un programa de gobierno exhaustivo" y unas prioridades económicas y presupuestarias "muy claramente marcadas".

Las Cuentas, según ha dicho, "no son importantes sólo por eso", sino que también lo son debido a que "a lo largo del año 2017 se van a producir importantes hitos en el terreno fiscal y en el financiero", entre los que ha citado la posible "actualización" del sistema tributario y las negociaciones con el Gobierno central para resolver las discrepancias sobre el Cupo, la suma que Euskadi paga al Estado por las competencias no transferidas.

CUPO Y FISCALIDAD

En materia tributaria, ha recordado que para los próximos meses está previsto evaluación de la reforma fiscal que entró en vigor 2014, y que también está previsto estudiar posibles "medidas de actualización" del sistema.

En el terreno de las relaciones financieras, se ha referido a las negociaciones con el Gobierno central en torno a las liquidaciones pendientes del Cupo, así como sobre la metodología para calcular dicha suma.

El consejero ha afirmado que este año "se puede llegar a sentar las bases de unas nuevas perspectivas económicas para los próximos años, que pueden resultar determinantes para la estabilidad, el crecimiento económico y la cohesión de la sociedad vasca".

Azpiazu ha mostrado su deseo de que las instituciones vascas sean capaces de "superar las exigencias del proceso de consolidación fiscal y cualesquiera otras contingencias que se puedan presentar", algo para lo que el Gobierno vasco "pondrá su mejor empeño" y confía en contar con la "colaboración" de los grupos opositores.