BILBAO - El grupo siderúrgico vasco Sidenor planteará a los sindicatos un plan flexible de medidas laborales, incluido un Expediente de Regulación de Empleo temporal, que le permita ganar la competitivida necesaria para volver a la senda de los beneficios de la mano de los nuevos dueños y de las importantes inversiones productivas previstas .

Sidenor se ha comprometido a empezar a negociar el próximo lunes 28 con los sindicatos el denominado Plan de Adaptación Laboral, que contemplará la presentación de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para todos los centros de trabajo de la compañía y “cuya puesta en marcha en cada planta dependerá de sus cargas productivas actuales y futuras”.

Este sería, en alguna medida, una propuesta similar a la eefctuada por Arcelor Mittal en su momento que tenía pactado un ERE, con las condiciones ya definidas, de varios años de duración que se aplicaba en función de las necesidades de cada momento en las diferentes plantas.

Las medidas laborales que quiere implantar Sidenor van de la mano de un importante plan de inversiones valorado en unos 90 millones de euros para modernizar las instalaciones, principalmente la de Basauri, la más grande e importante del grupo, en la que está previsto invertir 35 millones de euros en 2017, según la compañía que preside José Antonio Jainaga.

El plan incluye también medidas de formación de los trabajadores para dotarles de la multifuncionalidad necesaria para adaptarse a las necesidades presentes y futuras de la compañías en las diferentes áreas.

La dirección se reunirá con una delegación de los trabajadores formada por 13 miembros, (UGT, 4; CCOO, 3; LSB-USO, 2; ELA, 2; LAB, 1; y ESK, 1) en representación de los 2.460 trabajadores de la plantilla repartidas entre Basauri (757+155 de oficinas generales); Reinosa, 750; Azkoitia, 405; Gasteiz, 233; Polinya del Vallés, 58; Legutiano, 55; Maltzaga, 47; sin contar los 49 de la unidad de I+D que no estará incluida en el Plan.

El objetivo de la propuesta que “sólo contempla medidas no traumáticas” es lograr “disponer de un mecanismo que, acordado con los representes sindicales, permita tomar decisiones de forma ágil, organizada y acorde a las necesidades productivas”, señalaron fuentes de la compañía.

El sindicato LSB-USO adelantó ayer que exigirá “garantías de mantenimiento y estabilidad en el empleo, la vinculación de todas las plantas al grupo, así como unas condiciones dignas” para el ERE. - X. Aja