bruselas - El crecimiento de las economías de la eurozona y del conjunto de la UE perdió fuelle en el segundo trimestre del año con respecto a los tres primeros meses, al registrar un avance del PIB del 0,3% y del 0,4%, respectivamente, lo que supone una ralentización de tres y una décima. La oficina comunitaria de estadística Eurostat confirmó ayer el cálculo preliminar publicado el 29 de julio y sus datos adelantados revelan un ritmo de crecimiento menor entre abril y junio que el aumento del 0,6% y el 0,5% del PIB registrado entre enero y marzo en la zona del euro y la Unión Europea (UE).
Entre las grandes economías de la eurozona, la española fue de nuevo la que más creció en el segundo trimestre. Su PIB aumentó un 0,7% entre abril y junio en relación con los mismos tres meses del año anterior, con lo que duplicó la media de la eurozona y casi la de la UE. La economía española tiró de sus socios entre abril y junio, dado que la locomotora, Alemania, perdió ímpetu, al igual que Francia e Italia, que se colocaron a la cola. El PIB alemán creció un 0,4% en el segundo trimestre en comparación con el aumento del 0,7% registrado entre enero y marzo. La economía francesa por su parte se estancó, al igual que la italiana. De las mayores economías comunitarias solo la británica se acercó a la española con un crecimiento del 0,6% de su PIB en el segundo trimestre.
Pese a la ralentización en el conjunto de la eurozona y en menor medida en la UE, ambos bloques no quedan atrás en el crecimiento si se les compara con EEUU. Tanto las diecinueve economías de la zona del euro como los veintiocho del bloque comunitario crecen al mismo ritmo que la primera potencia mundial, cuyo PIB avanzó un 0,3% en el segundo trimestre en relación al primero y también se ralentizó una décima. En términos interanuales, el PIB de la eurozona se incrementó en el segundo trimestre un 1,6% y un 1,8% en la UE en su conjunto en relación al mismo periodo de 2015. En ese periodo, la economía estadounidense creció un 1,2%. - Efe