portugalete - Uno de los momentos más emotivos del 12º Congreso de UGT-Euskadi tuvo lugar ayer al mediodía, cuando los asistentes rindieron un sentido homenaje al histórico sindicalista de Barakaldo, portugalujo de adopción, Nicolás Redondo Urbieta. Tras la proyección de un vídeo repasando algunos de los momentos clave de su vida, el líder de UGT-Euskadi, Raúl Arza, le dedicó unas palabras de reconocimiento a “un referente”, un “luchador incansable” que es “historia viva” del sindicalismo vasco.

El veterano sindicalista, de 88 años de edad, estuvo presente en la totalidad de las intervenciones producidas ayer en la primera sesión del congreso, todas ellas para agradecer y valorar su trayectoria. El propio Raúl Arza se encargó de rendirle homenaje con unas palabras en las que recordó la trayectoria del vizcaino, marcada por su relevante papel en la construcción de UGT y del socialismo en general en el Estado español. “Un luchador incansable, un hombre que ha gastado su vida y sus energías en defensa de este sindicato y de los trabajadores”, dijo el líder de UGT-Euskadi poco antes de entregarle un trofeo en reconocimiento a su “sacrificio y entrega”.

Entre los momentos de su vida que se recordaron destaca la etapa en las juventudes socialistas, sus inicios como trabajador en La Naval o su participación en el movimiento obrero en la clandestinidad durante la dictadura. Nicolás Redondo fue testigo directo de la represión, exiliado a Francia y encarcelado por el régimen franquista, a cuyo final contribuyó de manera decisiva. Fue secretario general de UGT durante 18 años, entre 1976 y 1994, y también parlamentario socialista por Bizkaia.

Uno de los momentos más duros, como él mismo relató ayer, fue el cisma abierto entre UGT y el Gobierno de Felipe González que dio lugar a la huelga general de diciembre de 1988 y que en lo personal llevó a Redondo a dimitir como diputado.

Ayer, el histórico sindicalista instó a UGT a “defender opciones auténticamente de izquierdas” ante “el estruendoso silencio y la pasividad” de la socialdemocracia. “Puede parecer una utopía, pero hay que tener en cuenta que la utopía es una verdad prematura”, dijo. - A.L.