madrid - La compañía Telefónica obtuvo un beneficio neto de 776 millones de euros en el primer trimestre de 2016, lo que supone un 56,9% menos que los 1.802 millones de euros que ganó en el mismo periodo de 2015, en el que el resultado neto se vio afectado por un impacto positivo fiscal no recurrente.
La caída del beneficio que la compañía achaca a la ausencia de extraordinarios y al impacto en el cambio de las divisas se ha producido pese a la mejora del negocio en España donde los ingresos crecieron un 8,6% hasta los 3.126 millones de euros, evolución que contrasta con la caída del 6,6% en la facturación total que ascendió a 10.784 millones de euros.
Los dirigentes de Telefónica lamentaron también que no puedan cerrar la desinversión de su filial británica O2 por los efectos que el debate sobre la posible salida del Reino Unido del la Unión Europea.
En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la compañía destacó que excluyendo el referido impacto fiscal el beneficio neto de los tres primeros meses de 2016 se incrementó un 26%, lo que indica, según la compañía, que Telefónica ha avanzado “de forma significativa” en el crecimiento “rentable y sostenible”.
Por su parte, el beneficio bruto antes de amortizaciones (Oibda) se sitúo en los 3.376 millones de euros, un 6,7% menos en términos reportados, pero un 5,5% más en términos orgánicos fruto de la materialización de sinergias y de la mayor eficiencia en costes.
Telefónica explicó que las variaciones en términos reportados están sobre todo impactadas por los tipos de cambio, especialmente por la depreciación del real brasileño, el peso argentino, el bolívar venezolano y el peso colombiano.
En concreto, esa evolución de las divisas latinoamericanas respecto al euro han restado 16 puntos porcentuales a la evolución de los ingresos y 14,8 puntos porcentuales a la del Oibda, aunque dicho impacto se neutraliza en términos de generación de caja. - Europa Press