madrid - La situación de la mujer en el mundo de la empresa en 2016 sigue siendo discriminatoria respecto a los hombres, algo que se refleja, por ejemplo, en hechos como que entre los componentes de los consejos de administración de las mayores empresas del Estado español en bolsa, las que configuran el Ibex-35, el personal femenino no llega a dos de cada diez mientras que si se analizan los datos del desempleo se observa que una de cada cuatro mujeres está en paro.
Aunque la situación de la mujer en la empresa mejora año a año, sigue siendo un proceso lento y en algunos casos incluso se produces retrocesos puntuales, según se recogen en informes sindicales. En concreto, para UGT, la presencia de las mujeres en el mercado laboral español se ha agravado en 2015 y no sólo respecto a los hombres sino también a las trabajadoras de la Unión Europea, donde España tiene el dudoso honor de figurar como el segundo país europeo con el nivel de desempleo femenino más alto, con un 25,4%.
Aunque la presencia de la mujer empieza a ser masiva en profesiones como medicina, juridicatura etc, en los puestos de responsabilidad de las empresas su peso no tiene correlación con el porcentaje de titulados universitarios. Así, sólo el 19,83% de los puestos en consejos de administración de las empresas del Ibex 35 en 2016 están ocupados por mujeres y ello pese a que el porcentaje se ha incrementado un 13,75% respecto a la cifra del ejercicio precedente.
La presencia de mujeres en el superior órgano de gobierno de las empresas cotizadas en bolsa sigue estando en España por debajo del 21,2% de media de las empresas de los principales selectivos bursátiles de países de la Unión Europea. También se mantiene por debajo, muy por debajo, de las recomendaciones de la Comisión Nacional del Mercado de Valores español, un 30%, y de la misma Unión Europea, que aboga por una cuota de mujeres de al menso el 40% en los consejos de administración.
Las mujeres en España sufren el paro más que en Europa, pues suponen el 23% de todas las desempleadas y suman tantas paradas como Francia, Dinamarca Bélgica Alemania y Finlandia juntos, según el informe de UGT. El problema es que las mujeres no solo tienen una alta tasa de desempleo y un menor peso en los cuadros de mando de las empresas, sino que también ganan menos dinero que los hombres.
La brecha salarial se sitúa en España en un 24%, la más alta de los últimos 6 años, y según Eurostat, teniendo en cuenta el salario hora, es tres puntos por encima de la media de la UE, 19,3 % frente a 16,3%.
Así las cosas, tampoco extraña que la tasa de actividad de las mujeres sea inferior a la de los hombres en casi doce puntos, un 53,7 % frente a un 65,9 %, y lo es además en todos los territorios del Estado.