MADRID - ACS se dejó ayer un 3,59% en la sesión de Bolsa, después de que el cofundador del hedge fund (fondo de alto riesgo) Bodenholm Capital, Per Johansson, apuntara que el grupo español de construcción y servicios presenta irregularidades en su contabilidad. Sin embargo, la compañía presidida por Florentino Pérez aseguró que dichas manifestaciones “carecen de base alguna” y anunció que sus servicios jurídicos preparan una demanda contra el gestor “por los daños producidos en la imagen de la compañía”.
Según ACS, el cofundador del hedge fund basa sus opiniones, emitidas en una conferencia en Londres, en una demanda laboral presentada por un antiguo ejecutivo de Cimic, la filial australiana de la compañía.
No obstante, la constructora aseguró que dicha demanda “ha sido totalmente desestimada por el juez competente por carecer de todo fundamento” y que el ejecutivo que la presentó “fue despedido”.
Tras las declaraciones del gestor del hedge fund y la emisión del comunicado por ACS, los títulos del grupo cerraron la semana bursátil a 28,310 euros por acción.
Las acciones de la compañía encadenaron de esta forma seis jornadas consecutivas a la baja perdiendo un 8,3% de su valor.
Por otro lado, Corporación Financiera Alba, segundo máximo accionista de ACS, vendió un nuevo paquete de acciones de la compañía, representativo del 0,07% del capital social del grupo constructor, por un importe de 7,66 millones de euros.
Esta venta junto con la ya realizada esta misma semana, hacen que la firma de inversión de la familia March colocara un 0,138% del grupo que preside Florentino Pérez por un monto total de 13,5 millones de euros.
Corporación Financiera Alba retoma así las ventas periódicas de títulos de ACS que ya realizó en los pasados meses de enero y agosto, cuando vendió cerca del 1,74% del capital. - E.P.
