Gasteiz - La retirada del expediente de regulación de empleo (ERE), con sus 133 despidos, en la planta alavesa de la compañía Aernnova en Berantevilla ha abierto la puerta al diálogo entre empresa y trabajadores y entre empresa e instituciones vascas en aras a buscar una solución que permita mantener el empleo y la competitividad de la factoría.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, aseguró que el nuevo escenario “abre un camino de posibilidad de relación” desde las instituciones vascas con la compañía para hablar sobre “las necesidades” de la empresa aeronáutica vasca. Durante una rueda de prensa en Santander, Urkullu reconoció que la decisión de Aernnova es “un primer paso” para poder seguir hablando desde las instituciones vascas y desde la empresa sobre las “necesidades” de la compañía para adecuarse al mercado. En la misma línea, el diputado general de Álava, Ramiro González, se reunirá en los próximos días con el presidente de Aernnova, Iñaki López Gandásegui, para analizar la situación tras recuperar los canales de comunicación

Por su parte, desde el comité de empresa, todavía preocupados por la falta de trabajo, señalaron que se reunirán el jueves de la semana que viene en Madrid con representantes del Ministerio de Industria, a los que reclamará “implicación” con el mantenimiento del empleo en la planta de Berantevilla. Entre las peticiones se incluye apoyo para las inversiones y control de las ayudas públicas para evitar deslocalizaciones. - DNA