Bilbao - La entidad financiera vasca Laboral Kutxa, la mayor cooperativa de crédito del Estado español, obtuvo el año pasado un beneficio neto consolidado de 109,2 millones de euros lo que implica un crecimiento del 26,4% respecto al ganado en 2013. En esta mejora se refleja también el hecho de que la entidad presidida por Txomin Garcia redujo un 14,9% la cuantía de las provisiones que ascendió a 119,5 millones de euros al calor de la recuperación de la economía.

La caja vasca mejoró sus resultados en línea con los cinco grandes bancos del Estado español que lo han hecho en un 27% y se situó como una de las entidades más rentables del sector con un ROE, el indice que mide la rentabilidad sobre recursos propios, del 7,56%, una cifra por encima de la media de la banca europea y española que está en el entorno del 6%.

Aunque la situación de la economía evolucionó positivamente en 2014, lo que ha ayudado a reducir las tasas de morosidad, el volumen total de créditos a clientes de Laboral Kutxa alcanzó los 14.143 millones de euros, un 5,65% menos que en el año precedente. De esa partida, la mayor parte, unos 10.258 millones, correspondió a préstamos hipotecarios, que contabilizaron un descenso interanual del 3,9%, aunque este negocio repuntó en la segunda parte de 2014 y creció un 25%. Un aspecto destacable es que la financiación a las empresas se empieza a recuperar y de hecho los dirigentes de Laboral Kutxa consideran que el pasado año ha supuesto “un punto de inflexión”, lo que se ha traducido en un incremento del 29% en los créditos a las compañías, fruto de la mayor demanda y actividad comercial.

Los responsables de la entidad financiera guipuzcoana destacaron la complejidad del escenario macroeconómico para la actividad bancaria por el escenario de tipos de interés en mínimos históricos lo que recortó un 7% el margen de intereses, hasta 368 millones de euros. La cooperativa de crédito vinculada al Grupo Mondragón mantuvo los ingresos por comisiones que ascendieron un 0,1%

Un aspecto a destacar de la gestión de Laboral Kutxa el pasado año es que fruto de la adecuada gestión de los riesgos de crédito logró situar situó su tasa de morosidad en el 8,59%, con una reducción de 1,09 puntos respecto al precedente 2013, de forma que la morosidad que soporta la entidad están claramente por debajo de la media del sector financiero del Estado español que era del 12,6% al cierre de diciembre.

La paulatina recuperación de la economía todavía no permite al sector financiero volver a los niveles de antes de la crisis, recuérdese que Caja Laboral antes de la fusión con Ipar Kutxa ganó 185 millones en 2007, pero la entidad financiera vasca ha mejorado sus niveles de solvencia. En este sentido es de destacar que al cierre de 2014 contaba con un ratio de solvencia (CET 1) del 13,56%. Por ejemplo, el Santander tras realizar una ampliación de acpital de 7.500 millones de euros tiene un ratio del 9,7%, inferior.