madrid - Hacienda abrió una inspección a todos los exconsejeros y exdirectivos de Caja Madrid imputados por el escándalo de las tarjetas opacas, los cuales han procedido a elaborar las respectivas declaraciones complementarias, según desvelaron ayer varios de ellos en la Audiencia Nacional. Nueve de los 82 usuarios de las visas opacas volvieron a diferir sobre el objeto con que se les entregó, y mientras unos han defendido que eran de “libre disposición” para uso personal, otros han justificado que solo estaban destinadas a gastos de representación y los últimos que podían emplearse con ambos fines.
En lo que sí coincidieron todos, para los que Anticorrupción ha pedido fianzas civiles equivalentes a lo gastado, es en asegurar que siempre pensaron que era la entidad, como titular de las tarjetas, la que debía practicar las retenciones, han informado fuentes jurídicas. Uno de ellos, José María de la Riva, aludió incluso a un acuerdo con el Ministerio de Hacienda según el cual los consejeros no debían tributar. Según De la Riva, que entendió su tarjeta como un instrumento para gastos de representación, se interesó en numerosas ocasiones por el asunto de la tributación, pero desde la caja le respondían que no debía preocuparse.
Mientras, el exsecretario de Estado de Hacienda Estanislao Rodríguez Ponga explicó que se trataba de un concepto retributivo diseñado para efectuar cargos derivados de su puesto, lo que ha provocado que el magistrado le preguntase si eso incluía compras en El Corte Inglés. Rodríguez Ponga contestó que la función de consejero exigía hacer regalos, aunque ha añadido que es muy difícil aportar un listado de beneficiarios dado el tiempo transcurrido.
Al exministro socialista Virgilio Zapatero no le sorprendió que le entregaran una visa para gastos de representación, ya que su cometido era “acercar la universidad a las cajas” y preparar un programa de educación financiera, aunque dijo al juez que siempre se sintió “incómodo” con que no hubiera ningún control en los gastos. El que fuera mano derecha de Rodrigo Rato, José Manuel Fernández Norniella, relató que él recibió su visa en 2006 para “gastos discrecionales hasta un limite”, y negó que, tal y como sostuvo el socialista José María Arteta, él autorizara su uso hasta tres meses después del cese.
forzar la ley El exdirectivo de Caja Madrid Pablo Abejas acusó al juez Fernando Andreu de “forzar” el Código Penal y hacer un revoltijo en el caso de las tarjetas opacas, movido por “reproches mediáticos” y “clamores populares”, y pidió su archivo por prescripción.
En su recurso contra el auto en que se le imputa junto a otros 81 exconsejeros y exdirectivos de Caja Madrid, el que fuera presidente de la Comisión de Control de la entidad apela a la indefensión que le ha generado el hecho de que no se le haya trasladado la denuncia de Anticorrupción que dio origen a esta pieza separada del conocido como caso Bankia. - Efe