madrid - La empresa Aena, el gestor de los aeropuertos del Estado español, salió a cotizar ayer a Bolsa tras la oferta pública de colocación (OPV) del 49% del capital por parte del Estado español. La sesión bursátil estuvo protagonizada por el éxito del debut de los títulos de Aena, ya que desde el inicio se registró una fuerte tendencia al alza de forma que al cierre las acciones contabilizaron una revalorización superior al 20% hasta los 70 euros.
Los fuertes incrementos del valor en la sesión de ayer reflejan la apuesta de los inversores por una compañía que debería registrar notables tasas de crecimiento en los próximos años gracias a la recuperación del tráfico aéreo de la mano de una economía al alza y a unos precios más bajos de los combustibles de aviación.
Con la salida a Bolsa se pone fin al proceso de privatización parcial de Aena que empezó el año pasado y que aportará a las arcas públicas que gestiona el Gobierno español de Rajoy hasta 4.260 millones de euros. Aena fijó el lunes en 58 euros el precio de emisión de sus acciones, valorando el 100 por cien de la compañía en 8.700 millones de euros.
Es la mayor privatización en el Estado español desde 1997 y, teniendo en cuenta el llamado greenshoe, la cláusula que permite a los colocadores vender más acciones de las inicialmente previstas si hay mucha demanda como ha sido el caso, la mayor salida a bolsa en la historia española.
En términos de capitalización, Aena se sitúa por debajo de su rival francés Aeroports de Paris (unos 10.550 millones de euros).
Según datos adelantados el martes por la ministra Ana Pastor, el número de pasajeros en los aeropuertos españoles creció en enero un 5,3% hasta 11,6 millones.
El éxito de al colocación no evita las críticas de toda la oposición que cuestionan el modelo único y centralista de gestión de los aeropuertos en el Estado español con escaso parangón en el mundo occidental. En Europa, incluída la centralista Francia, las regiones, ayuntamientos y cámaras de Comercio participan en la gestión de los aeropuertos ya que son los primeros interesados en su éxito. Catalunya y Euskadi llevan tiempo solicitando la gestión de las piestas. - X.A.
