bilbao - La destrucción de empleo y los menores niveles de contratación han ido envejeciendo la población ocupada durante la crisis. La CAV ha perdido 135.000 ocupados desde 2007, pero el retroceso se ha cebado con los jóvenes en mayor proporción que con los trabajadores de más edad. El Informe Laboral Euskadi que elabora la UPV/EHU constata que cerca de la mitad de los ocupados vascos son ya mayores de 45 años, un colectivo que ha avanzado mucho terreno sobre el total de la población trabajadora desde 2007, mientras los menores de 25 no alcanzan el 4%.

Este progresivo envejecimiento del mercado de trabajo es una de las conclusiones destacadas en el informe de la UPV/EHU relativo al cierre de 2014, que analiza, con base en la Encuesta de Población Activa del INE, los detalles del empleo en Euskadi. Como remarca el informe que coordina la catedrática Sara de la Rica, al final de 2014 el 46% de los ocupados vascos tenía más de 45 años, una tasa que avanzó un punto porcentual el año pasado. Desde 2007 este colectivo ha aumentado su presencia sobre el total de los asalariados un 9%.

Los datos de Eustat confirman que la crisis ha incidido en menor medida sobre este grupo de edad, que según el servicio vasco de estadística cerró el año pasado con una tasa de paro inferior al 10% -la media de la CAV es del 14,5%-. En el otro extremo, los jóvenes pierden peso en el mercado de trabajo, fruto de las escasas oportunidades laborales y la brevedad y precariedad de los contratos a los que tienen acceso, que en general facilitan un rápido retorno a las filas del paro. La tasa de paro entre los menores de 25 es del 40%, según Eustat, cuando en 2007 no alcanzaba el 8%. El Informe Laboral constata que, mientras que los jóvenes no representan ni el 4% de los ocupados de la CAV, “la edad media de los parados rejuvenece sensiblemente en la crisis, especialmente en el último año, ya que el colectivo mayor de 44 años pierde presencia a favor de los más jóvenes”.

La propia De la Rica señaló ayer durante la presentación del estudio que esta tendencia va a suponer un grave problema ya que “dentro de diez años se alcanzará la máxima tasa de envejecimiento y se necesitarán todos los jóvenes posibles”. La catedrática recordó que muchos jóvenes en paro se están marchando al extranjero. “Hay gente que dice que ya volverán, pero yo creo que igual vuelven o igual no”. En líneas generales, la ocupación baja de manera contundente durante la crisis, y la población en desempleo crece en 80.000 personas en siete años. En 2014 sigue creciendo el colectivo de parados pese al leve repunte de la ocupación, una mejoría del empleo que se concentró en el último trimestre.

De los 174.000 parados de la CAV, un 67%, es decir, más de 110.000, son de larga duración -más de un año en paro-. Antes de la crisis apenas 10.000 personas se encontraban en esta situación, un tercio del total, lo que da una idea de cómo ha ido agravándose el panorama dentro del colectivo de desempleados. Euskadi cuenta con uno de los porcentajes de parados de larga duración más elevados, solo superado por el de la Comunidad Valenciana y el de Canarias.

Según De la Rica, entre 90.000 y 100.000 parados vascos corren riesgo de quedarse al margen de la rueda del mercado de trabajo. “Si no se hace algo van a tener muy mala empleabilidad a pesar de la reactivación económica. Cursos, formación, algo”, demandó la experta bilbaina. Y es que, según el INE, unos 70.000 de estos parados de larga duración llevan ya dos años sin trabajar con las consecuencias económicas, sociales y personales que esta situación acarrea y las dificultades que se presentan para volver a encontrar un empleo. “Hay un porcentaje de desempleados para los que el tren de la recuperación no va a pasar por su estación”, advirtió.

A pesar de la radiografía negativa hay algunos claros entre tantas nubes, ya que tras el tímido avance del empleo en 2014 se espera que 2015 consolide la mejoría. De la Rica indicó que el primer trimestre de será todavía malo para el empleo, aunque el conjunto de 2015 será positivo. Factores como el bajo precio del petróleo y la recuperación del consumo harán mejorar la economía y el mercado laboral, aunque sin grandes alegrías. El incremento del empleo será aún débil y con una elevada presencia de contratos temporales y a jornada parcial. La capacidad que tenga el sector industrial de dar la vuelta a sus malos dígitos de los últimos años será determinante en la evolución y la calidad de la contratación.

convenio del metal Por otro lado, LAB informó ayer de que el Tribunal Supremo ha denegado el recurso presentado por la patronal vizcaina del metal (FVEM), de manera que queda ratificada la vigencia del convenio del sector firmado para los años 2001 y 2003. La sentencia ratifica la línea marcada por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. El sindicato valoró que es una “buena noticia” para los trabajadores del sector, unos 50.000. En todo caso, el último convenio de la industria vizcaina es el que firmaron CCOO y UGT en minoría para el periodo 2008-2011, que de facto se viene aplicando en la mayoría de industrias del territorio.

Menos ocupados. La población con trabajo de la CAV ha pasado del 55% del total de población en 2007 al 48,2% del cierre de 2014.Envejecimiento. El 46% de los ocupados tienen más de 45 años, nueve puntos más que antes de la crisis. Los menores de 25 representan menos del 4% de los ocupados de la CAV. Por contra, se observa un rejuvenecimiento de la población desempleada.

Más formación. Aumentan los trabajadores con formación universitaria, el 55% del total.

Más empleo parcial. Frente al retroceso del sector industrial en la crisis, aumenta el empleo a jornada parcial en los servicios. La CAV es la autonomía con mayor tasa de empleo parcial por delante de Nafarroa.

Más paro de larga duración. En la CAV el 67% de los parados llevan más de un año en paro, unos 116.000, mientras que antes de la crisis eran el 32%.