bruselas - Europa volvió ayer a amonestar al Gobierno español por sus datos de paro. En concreto, esta vez puso el acento en la tasa de paro juvenil que en el caso español alcanza cotas gigantescas con casi la mitad de los jóvenes en condiciones de hacerlo que no acceden al mercado laboral. Para la comisaria de Empleo, Marianne Thyssen, el alto nivel de paro juvenil en España es “insostenible” y, además, añade que la elevada segmentación entre contratos fijos y temporales sigue siendo uno de los principales problemas del mercado laboral, lo que podría requerir más reformas.

La amonestación de la comisaria no va a ningún sitio, simplemente se trata de una llamada de advertencia a un Gobierno, el presidido por Mariano Rajoy, que prefiere poner el énfasis en la evolución de los datos macroeconómicos, bastante más favorables que los del paro. Thyssen se encargó de recordarle una de las asignaturas pendientes más graves. “En España la tasa de paro es alta, especialmente entre los jóvenes la tasa de paro es muy alta, demasiado alta, y no es sostenible, pero hay una mejora”, afirmó durante una rueda de prensa para presentar el informe sobre la situación del empleo en la UE en 2014.

Sobre la segmentación del mercado laboral, la comisaria de Empleo señaló que es muy alta en España “y este podría ser uno de los puntos en los que España podría mejorar”. El Ejecutivo comunitario estudiará ahora todos los datos y formulará nuevas recomendaciones al Gobierno de Mariano Rajoy en primavera, que podrían incluir “la necesidad de reforma del mercado laboral”, apuntó.

El informe pone de relieve que durante la crisis económica entre 2008 y 2014 se destruyeron un total de 6,7 millones de puestos de trabajo en la UE. La mayoría del empleo se perdió en España (3,4 millones de puestos de trabajo), Italia (1,2 millones) y Grecia (1 millón), mientras que el empleo aumentó en Alemania (1,8 millones) y Reino Unido (900.000). “En España, el desproporcionado impacto (de la crisis) en el empleo -al menos dos veces más grande que el impacto económico- reflejaba la importancia relativa del sector de la construcción y el mercado laboral altamente segmentado del país”, apunta el estudio.

En contraste, Thyssen puso el ejemplo de Alemania, donde la fuerte caída del PIB se absorbió mediante una reducción del tiempo de trabajo en lugar de mediante una reducción del empleo, “sobre todo por el uso extendido de acuerdos para reducir las horas trabajadas”, señala la Comisión.

La comisaria de Empleo resaltó que la recuperación económica en la UE es “limitada y frágil” y que el paro, pese a haber bajado en 2014, todavía es “demasiado alto” en el 10% de media. “Hay nueva creación de empleo, pero es demasiado lenta”, lamentó. Además, los nuevos puestos de trabajo no garantizan un nivel de vida suficiente y el paro de larga duración sigue aumentando.

Thyssen puso a Dinamarca, Austria, Suecia y Holanda como ejemplo de los países que mejor han resistido a la crisis en materia de empleo. Ello se debe, a su juicio, a que cuenta con un mercado laboral más abierto y más segmentado y hacen un mayor uso de acuerdos para reducir las horas trabajadas e invierten más en formación continua y activación. “Las prestaciones por desempleo están ampliamente disponibles vinculadas a la activación y responden al ciclo económico”, precisó.

empleo femenino La comisaria de Empleo también elogió los sistemas de prestaciones sociales de Malta, Luxemburgo, Holanda y Austria porque invierten más en educación y cuidado de niños pequeños, lo que permite una mayor tasa de empleo femenino. Thyssen apostó por más reformas estructurales en los mercados laborales de los Estados miembros y por reducir la carga fiscal sobre el trabajo, en particular en los contratos para jóvenes y personas poco cualificadas. Además, anunció que Bruselas presentará a finales de año un paquete de medidas para fomentar la movilidad laboral entre los Estados miembros.

Por otra parte, la Comisión Europea considera que las tasas con las que seis autonomías gravan a las grandes superficies son ayudas de estado incompatibles con la normativa europea.Por este motivo pide que se retiren o modifiquen para que dejen de penalizar a unos formatos comerciales frente a otros, según un escrito de Bruselas remitido al Gobierno.

Actualmente, gravan con un impuesto específico a las grandes superficies Catalunya, Aragón, Asturias, Nafarroa, La Rioja y Canarias. Estas tasas “medioambientales”, que fueron denunciadas ante la Comisión Europea (CE) por la patronal de las grandes superficies Anged, gravan los metros cuadrados de un establecimiento por la contaminación que producen los consumidores por desplazarse en coche hasta ellos.