BILBAO. En una entrevista concedida a Radio Euskadi, ha señalado que, tras un periodo en el que "el paro aumentaba año tras año en cifras francamente preocupantes", se está dando "un giro" con una evolución de la actividad económica "a mejor" y un impacto en el empleo que "se está empezando a detectar".
En este contexto, ha indicado que "la expectativa para 2015 es razonablemente positiva, sin echar campanas al vuelo", no sólo en función de las previsiones del Gobierno vasco, sino de "todos los estudios económicos". "Con todas las cautelas del mundo, hay motivos para no ser pesimistas", ha opinado.
El portavoz del Ejecutivo ha considerado que la temporalidad del empleo que se está empezando a crear constituye "un segundo reto". "Vamos a darle la vuelta primero a la situación económica, a pasar de la recesión a la recuperación, a que la economía empiece a crear empleo neto, y luego vamos a centrar la atención en que el empleo sea, además, estable y de calidad. Todo al mismo tiempo no siempre se puede asegurar", ha añadido.
En este sentido, ha apuntado que "tiene una cierta lógica que, cuando todavía el empresario que crea empleo no tiene la expectativa absolutamente segura, tome decisiones relativas a sus empleados con mucha cautela y empiece ofreciendo condiciones de temporalidad, de más inestabilidad". "Y, conforme la situación económica se asienta y las expectativas económicas positivas se confirman, todo esto tendrá su impacto también en el empleo, creando condiciones más estables y seguras", ha agregado.
También se ha referido a la situación de los desempleados jóvenes y de larga duración, un "problema complejo" que se da en "toda Europa". Tras recordar los programas puestos en marcha para fomentar el empleo en estos colectivos, ha lamentado que algunos de los programas "importantes" dirigidos a emplear a jóvenes no han tenido "los efectos que nos hubieran gustado", aunque ha esperado que "la recuperación económica también redunde ahí".
Preguntado por la posibilidad de que pueda reducirse el número de perceptores de la Renta de Garantía de Ingresos, ha eludido hacer "vaticinios" sobre "algo que está por ver", si bien ha opinado que, en la medida en que comience a crearse empleo, "la lógica consecuencia debería ser que los perceptores de la RGI disminuya".
FRACKING
Por otro lado, se ha referido a la polémica generada por el uso de la técnica del fracking, recordando que el Gobierno "no ha tomado posición sobre la necesidad de explorar o explotar" la fracturación hidráulica, sino que "ha planteado la necesidad de respetar escrupulosamente la normativa medioambiental que es bastante ambiciosa y que está vigente en Euskadi".
"Dentro del respeto a esta exigencia legal, las actividades económicas son libres. El Gobierno ha puesto énfasis en la necesidad de respetar nuestra normativa medioambiental, no solamente con el fracking, con cualquier otra actividad que se pueda producir y que afecte al medio natural. Es un límite que tiene que exigir a los demás y a sí mismo", ha insistido.