los precios de los principales servicios públicos y de los transportes se congelarán o registrarán ascensos moderados en 2015 en un contexto general de desinflación.

El próximo martes se conocerá el dato adelantado del Índice de Precios de Consumo de diciembre, que previsiblemente arrojará cifras negativas, después de que en noviembre la tasa anual descendiera al -0,4%.

Aunque capítulos con gran incidencia sobre el gasto público, como las pensiones, han quedado desvinculados del Índice de Precio de Consumo al estar referenciados a otros factores específicos definidos en su propia reforma, y la Ley de Desindexación ha desligado también los precios de contratos públicos del Índice de Precios, el contexto general de la desinflación y la caída del precio del crudo influirán en los precios de los servicios básicos.

Así, pese a que el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy calificó el viernes de “modestas” tanto la subida del 0,5% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que se eleva a 648,6 euros mensuales (tres euros más al mes), como la revalorización del 0,25% de las pensiones para 2015, el mínimo establecido por ley, cree que los ciudadanos tendrán más capacidad de compra porque coinciden con un IPC en cero o en negativo.

Además de que los precios de los principales servicios públicos y transportes se congelarán o subirán de forma moderada en 2015, tampoco hay que olvidar que el próximo jueves 1 de enero entra en vigor la reforma fiscal que, según cálculos del Gobierno, supondrá un ahorro medio del 12,5% del IRPF para todos los contribuyentes en 2015 y que devolverá 9.000 millones de euros a los ciudadanos entre los años 2015 y 2016. El 72% de los declarantes, que cuenta con rentas inferiores a 24.000 euros al año, contará con una rebaja media en el IRPF del 23,5%, mientras que esa rebaja será del 19,3% para los contribuyentes con una renta menor a 30.000 euros. Los asalariados que ganen menos de 12.000 euros al año dejarán de tributar.

El coste recaudatorio de las modificaciones de la reforma en el IRPF ascenderá en 2015 y 2016 a 5.981 millones de euros y en el impuesto sobre la renta de no residentes (IRNR) a 110 millones, lo que suma 6.091 millones de euros. De los 5.981 millones, 3.366 corresponden al próximo año y 2.615 a 2016.

En lo que se refiere a los precios de la energía, supondrán en el inicio de 2015 un pequeño respiro para los usuarios, con la mayoría de ellos congelados o a la baja.

En el caso de la electricidad, el Gobierno congelará la parte regulada del recibo de la luz en 2015, conocida como peajes, después de que en 2014 la factura eléctrica de los hogares haya experimentado un descenso del 4,9%.

Asimismo, la factura de electricidad de los consumidores industriales se ha abaratado un 1,5% en 2014, si bien el recibo doméstico de gas natural ha experimentado una subida del 0,5% durante el ejercicio.

En lo que respecta a la electricidad para los hogares, este descenso del 4,9% en 2014 es el segundo anual consecutivo, tras el 3,7% de 2013, con lo que se rompe una tendencia de subidas anuales continuadas de más de una década.

Por su parte, la tarifa de gas natural registrará un descenso del 3% a partir de este próximo enero como consecuencia de la congelación de los costes regulados, conocida como peajes, y de la caída de los precios del petróleo que también afectará. Mientras, en el caso de los usuarios de la bombona de butano, el precio también se mantendrá congelado en los 17,5 euros actuales durante el primer trimestre de este año 2015 que viene.

También se notará este alivio en el bolsillo de los consumidores en el caso de los carburantes, donde, según la Asociación de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP) se ha trasladado a los precios de venta al público la caída en los precios de la cotización internacional de los productos, lo que ha llevado a que, con respecto a principios de año, el precio del litro de gasolina sea un 13% más barato y el gasóleo se ha ya abaratado un 14,6%, según datos del último Boletín Petrolero de la UE del año.

Por su parte, Telefónica congelará en enero el precio de la cuota de abono, medida que prorroga así por segundo año consecutivo. La compañía no prevé realizar modificaciones en el alquiler de línea al menos en la primera parte de 2014.

La última subida que aplicó la compañía a la cuota de abono data de mediados de 2013, cuando elevó hasta los 14,38 euros al mes más IVA (un 2,9%) el precio, que permanecía congelado desde 2008.

La cuota la pagan los clientes de telefonía fija y banda ancha fija de Telefónica que no tienen contratado ningún paquete de servicios como Fusión o Tarifa Plana Hogar, de modo que las variaciones en el alquiler de línea sólo repercuten en 1 de cada 10 minutos tarificados.

En cuanto a las tarifas de tren, Renfe subirá un 1,85% el precio de los billetes de los trenes de Cercanías, Media Distancia (tanto convencional como Avant), y Feve.

Se trata del menor encarecimiento desde al menos 2007 que registran estos servicios ferroviarios considerados públicos. Las tarifas del AVE y la Larga Distancia, que no dependen del Gobierno, sino de la política comercial de la operadora, se mantendrán.

El precio medio del peaje de la red de autopistas dependientes de la Administración del Estado no subirá en 2015 por vez primera en los últimos cinco años. La congelación de precios coincidirá con el repunte del tráfico, que se anotará en 2014 su primer aumento anual de los últimos ocho años, de alrededor del 3%.

Además, Fomento estudia habilitar en 2015 bonificaciones en los peajes para circular en horas valle (las de menor intensidad tráfico) por algunas autopistas a través de la consecución de acuerdos con las concesionarias. - E.P./Efe