Donostia - El Kursaal de Donostia acogerá hoy el Congreso 2014 de Mondragon, primero para Javier Sotil al frente del grupo desde que el pasado 14 de noviembre fuera designado presidente del Consejo General de la Corporación y que presentará el resultado del primer proceso de reflexión de los órganos corporativos, recogido en el documento Mondragon del futuro, y que ha durado unos nueve meses.

Al congreso acudirán 650 compromisarios de todas las cooperativas de la Corporación, que serán informados, tal y como adelantó el sábado este periódico, de la puesta en práctica en el futuro de un mecanismo de solidaridad exigente, por el que ayudará a las cooperativas del grupo en dificultades, siguiendo criterios para transformar esas situaciones de dificultad y, de este modo, no perpetuar las ayudas de los fondos solidarios.

Esta nueva forma de actuar con las cooperativas en crisis parte de las lecciones aprendidas con casos anteriores como el de Fagor Electrodomésticos, que captó fondos solidarios de la Corporación por valor de 300 millones de euros y al final acabó en liquidación.

Esta solidaridad exigente también prevé activar mecanismos de anticipación del problema y que las divisiones de Mondragon ayuden a detectar e identificar las herramientas para reconducir esas situaciones, junto con la propia cooperativa en dificultades.

Con el Congreso de hoy termina la primera fase de la reflexión iniciada por Mondragon y comenzará la segunda fase de debate en las cooperativas, con participación de todos los socios en el proyecto.

Otra idea analizada en el proceso de reflexión y que se deberá llevar a cabo en la segunda fase es la potenciación de las divisiones (órganos intermedios entre las cooperativas y la Corporación). Se pretende así que las divisiones tengan un papel más importante en la anticipación a las dificultades y de colaboración con las cooperativas para la transformación y el desarrollo de los negocios, añadiendo valor a la propia actividad que desarrollan estas.

El Grupo Mondragon insistirá en el futuro en la necesidad de la internacionalización, en la que en los últimos años ha hecho un esfuerzo “muy alto”. En la actualidad, el 71% de las ventas del área industrial son internacionales, con incrementos “importantes” en los últimos 4-5 años. Con motivo de la cita de hoy, las asociaciones de afectados por el concurso de acreedores de Fagor Electrodomésticos y Edesa, Ordaindu y Eskuratu, se concentrarán ante el Kursaal para reclamar una solución a su situación.

La asociación Eskuratu está formada por 331 afectados, que aportaron a Fagor Electrodomésticos a través de participaciones especiales, préstamos mercantiles y aportaciones voluntarias un total de 13 millones de euros, que ahora no pueden recuperar. Por su parte, los cerca de 770 asociados de Ordaindu aportaron 40 millones de euros, según informó un portavoz de Eskuratu.- DNA./E.P.