BILBAO - La caja de ahorros BBK se transformará en la fundación bancaria BBK el próximo 30 de junio, lunes, fecha en que está prevista la celebración de la asamblea ordinaria en la que se votará el cambio de su figura jurídica, según fuentes cercanas a las negociaciones que han mantenido PNV y PSE para acordar la fórmula del cambio y el futuro sistema de gobernanza de la fundación que controlará el 57% de Kutxabank.
Los 15 consejeros que integran el consejo de administración de BBK recibieron ayer el orden del día para la convocatoria, prevista para mañana, de la reunión del órgano de dirección de la caja de ahorros vizcaína. En la comunicación, se incluye la convocatoria de la próxima asamblea ordinaria de BBK en la que se votará la transformación de la entidad en fundación aunque sin precisar fecha.
La caja presidida por Xabier Sagredo será la segunda del Estado en cumplir el trámite exigido por la Ley de Cajas de Ahorro y Fundaciones bancarias, de 27 de diciembre de 2013, tras La Caixa.
Como se recordará, la troika formada por la CE, el BCE y el FMI, impuso al Estado español la transformación de las cajas de ahorros que fuesen accionistas de un banco, en fundaciones como una de las condiciones para conceder el préstamo que ha permitido el saneamiento del sector financiero español. En la citada Ley de Cajas de 27 diciembre de 2013, el Gobierno español fijó un plazo máximo de un año, o sea que vence a finales del presente 2014, para realizar la transformación en las cajas afectadas, entre ellas, BBK, Caja Vital y Kutxa.
La comunicación remitida a los consejeros de BBK indica, además, que la asamblea aprobará los estatutos de la nueva fundación y la designación de las personas que integrarán el patronato que regirá la fundación.
La presidenta del BBB del PNV, Itxaso Atutxa, confirmó ayer que existe un principio de acuerdo con el PSE-EE para convertir a BBK y la Caja Vital en fundaciones, consenso que pretende hacer extensivo también al PP. En este sentido, se señala que "las conversaciones están bien encaminadas", lo que permitiría cerrar también el proceso en la Vital antes de otoño como se plantea en Kutxa por la postura contraria de EH Bildu. El pacto incluye el "compromiso" por mantener "la obra y el arraigo social" así como "el control vasco" de la entidad.
El acuerdo incluye también la decisión de que la elección de los integrantes del patronato "se aleje de intereses partidistas". El 25% de ellos serán nombrados por las entidades fundadoras, diputaciones y ayuntamientos, y el 75% restantes deberán ser "personas de contrastada experiencia profesional" .