MADRID. El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha presentado en rueda de prensa las propuestas de la patronal para la reforma fiscal, que hoy han sido aprobadas por su Junta Directiva y que giran en torno al diseño de un sistema más simple que contribuya a generar más ingresos y a reducir la "alta tasa" de economía sumergida.
Rosell, que ha estado acompañado por la presidenta de la Comisión Fiscal y vicepresidenta de la patronal, Pilar González de Frutos, ha abogado por incentivos para aflorar la economía sumergida y acabar con el fraude, y ha puesto como ejemplo el caso de los empleados de hogar, un colectivo de alrededor de 700.000 trabajadores de los que sólo cotizan 400.000.
El presidente de la patronal ha apostado por "pasos incentivadores" para convencer "por la vía de los hechos" y ha dado el ejemplo de algunos países del norte de Europa "que han puesto a las empleadas de hogar una cotización a la Seguridad Social muy baja e incluso alguna bonificación en el IRPF".
"No somos favorables a las bonificaciones pero lo veríamos bien si se trata de convencer para que se pase de la economía irregular a la regular", ha precisado Rosell.
"No somos unos aventureros" ha dicho el presidente de la patronal en referencia a las peticiones de rebajas impositivas y ha añadido que "no se trata de bajar los impuestos a la mitad", sino de hacer un análisis sobre la fiscalidad en línea con lo que se hace otros países.
Ha exigido que todo esto "se haga una vez" y perviva al menos una legislatura, "no se esté cambiando cada año, con cambios a nivel estatal y autonómico".
En cuanto al IRPF, la patronal sostiene que debería eliminarse el gravamen adicional establecido para los ejercicios 2012 y 2013, y prorrogado para 2014.
Del IVA, González de Frutos ha dicho que el "auténtico problema es la lucha contra el fraude por lo que ha estimado innecesario y contraproducente un aumento de los tipos".
Por ello, ha apelado a elaborar una nueva ley que "ponga orden" en materias como "las deducciones, la incidencia sobre las retribuciones en especie a los empleados, las operaciones inmobiliarias, las exenciones o la morosidad".
El documento, que será remitido al Gobierno, aboga también por eliminar "de manera definitiva" el impuesto sobre el patrimonio, mientras que en relación al impuesto de sucesiones estima que debe suprimirse "o al menos elevar el mínimo exento".
Según la propuesta presentada, el sistema fiscal actual ha agotado su capacidad de generar más ingresos a través de subidas de impuestos por lo que de producirse "redundarán en una menor actividad económica e incrementarán las cifras de la economía sumergida".
La patronal también pide más coordinación entre las políticas tributarias centrales y autonómicas, para "evitar la proliferación de impuestos y tasas de las autonomías".
En este asunto, la vicepresidenta de la CEOE ha señalado que "la presión" de los últimos años ha llevado a las administraciones autonómicas a la creación "en cascada" de impuestos "de pretendida fiscalidad medioambiental" que finalmente "perjudican la equidad, crean fracturas y tienen un exclusivo fin recaudatorio".
Respecto a los trabajadores autónomos, ha apostado por eliminar el sistema de módulos mientras que Rosell ha estimado mas conveniente estudiar el asunto, sector a sector.
En cuánto a la deducción de vivienda con efectos retroactivos, ha dicho que este asunto no está recogido en el documento y ha señalado que su opinión personal es que "una eliminación con efecto retroactivo no contribuye a la seguridad jurídica".