donostia. La Diputación de Gipuzkoa admitió ayer que la caída de Fagor Electrodomésticos tendrá consecuencias en su recaudación fiscal. La Hacienda guipuzcoana ha ingresado 2.671,3 millones de euros más entre enero y octubre, un 4,3% que el año anterior. Está "muy cerca" de cumplir con su previsiones para el conjunto del año (4,4%) pero la caída de Fagor obliga a hacer una lectura prudente de los datos.

Por ello, Gipuzkoa aseguró que aunque los dos datos de los diez primeros meses del año "resulten positivos", la Hacienda foral opta por la "cautela" al interpretarlos, "ya que habrá que tomar en cuenta las consecuencias del futuro de Fagor Electrodomésticos".

Existe gran preocupación en la institución gobernada por Bildu por el importante peso que tiene el grupo cooperativo y su industria auxiliar en la economía guipuzcoana. Habrá menos ingresos fiscales y por el momento el único papel que pueden jugar las instituciones públicas es buscar fórmulas para minimizar el impacto social.

Con todo, el concurso de acreedores "complica las salidas" pero "no cierra las vías" para que se pueda dar una "salida ordenada" e incluso se pueda dar continuidad a alguna de las actividades de la cooperativa, sostuvo el ente foral.

En declaraciones a Europa Press, fuentes de la institución foral señalaron que el concurso de acreedores abre un "nuevo escenario" que ya estaba previsto desde hace tiempo.

En este sentido, destacaron que la reunión mantenida esta semana entre el diputado de Gipuzkoa, Martin Garitano, y el presidente de Kutxabank, Mario Fernández, además de "algunos movimientos con otros actores" hacen "abrigar la posibilidad de que no haya una liquidación en la que se subasten simplemente los activos de la empresa", sino que se puedan buscar "salidas" a los negocios que puedan tener viabilidad.

La Diputación guipuzcoana cree que, pese al concurso de acreedores, se mantiene "abierta" la opción de que se pueda buscar un plan de viabilidad para la empresa. "Se trata de aprovechar estos meses en los que la autoridad judicial y los administradores tienen para concretar las deudas y los acreedores para ir trabajando en posibles planes de viabilidad y ver juntos la menor afección que pueden tener los trabajadores y las empresas del grupo", concluyeron.