TOLEDO. Los pensionistas no están de acuerdo con la reforma del sistema aprobada por el Gobierno y consideran "bajito" el incremento del 0,25% en la cuantía de las pensiones y se interrogan sobre si esa es la forma de "premiar" al colectivo tras estos años de crisis. Así se lo dijo a la ministra de Empleo la secretaria general de la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados, Margarita García Durá, ayer en un debate sobre el sistema público de pensiones organizado por el PP en Toledo .
"Las medidas no nos gustan" reiteró García Durá, quien se preguntó si las medidas "agresivas" implantadas es la forma que tiene el Gobierno de "premiar" a los pensionistas tras estos últimos años de "dureza" económica. Margarita García Durá formó parte del trío de expertos que participó en el debate moderado por el vicesecretario general de Organización, Carlos Floriano, junto a los economistas Juan Iranzo y Rafael Domenech. Ante la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, la representante de los pensionistas afirmó que reducir el sueldo de los funcionarios o congelar las pensiones es "muy fácil", pero se preguntó si el Gobierno español, en su lugar, no debería haberse preocupado por la "viabilidad" de otros sistemas como "el de las autonomías".
En este sentido señaló que le gustaría que el Gobierno diese "un paso adelante" en otras cuestiones para que colectivos como el suyo no sean "los únicos" que paguen "las consecuencias" de la crisis. Tras advertir que los pensionistas están perdiendo poder adquisitivo que van a tardar "años en recuperar" y alguno de ellos no lo recuperará ya "nunca", García Durá resaltó que le hubiera gustado que el Gobierno hubiese tomado medidas tan "agresivas".
Bonanza económica Las reflexiones de García Durá recibieron la respuesta inmediata de la ministra de Empleo, quien aseguró que no es una reforma cerrada y queda mucho debate. Además, insistió en que con la reforma "las pensiones subirán siempre" y que la subida del 0,25 % es mínima, y podrá ser mayor cuando vuelva la bonanza económica. Desde otra óptica, el economista Juan Iranzo defendió que las pensiones tengan ahora, en un momento en el que la inflación está en niveles muy bajos, una "revalorización mínima". Iranzo puso en valor la reforma del Gobierno y señaló que España no podía correr el riesgo de Holanda, cuyo sistema de pensiones quebró y obligó a reducir estas prestaciones un 30%.