La contracción de los salarios no solo supone menos ingresos para las arcas públicas a través de la nómina de los trabajadores, sino también a través del IVA dado que a menores sueldos menor es el gasto familiar. Frente a los teóricos que apuntan que para sostener la recaudación es mejor reducir la presión fiscal, el Ejecutivo de Rajoy aprobó una subida de IVA hace un año para tratar de mantener los ingresos a través del consumo, una fórmula que pese a su impopularidad logra mantener el listón de la recaudación por esta vía. Entre enero y julio de 2013 el Estado ha ingresado un 8% más gracias a este impuesto, mientras que el empujón también lo notan las haciendas de la CAV con un incremento de los ingresos por IVA del 8,8% hasta agosto. En cuanto al Impuesto de Sociedades, el buen comportamiento del tributo en Euskadi, con un incremento de la recaudación del 10%, contrasta con el desplome registrado en el conjunto del Estado. Precisamente son IVA y Sociedades los tributos que logran contrarrestar el efecto negativo del IRPF sobre la recaudación de la CAV, de manera que los ingresos de las tres diputaciones crecen en los niveles previstos.