desde siempre nos han querido vender, al menos la mayoría de los fabricantes de automóviles, a los modelos deportivos de tres puertas y estilo cupé como vehículos caros, exclusivos, radicales y destinados a compradores que buscaban sensaciones fuertes y distinguirse del resto de los conductores. Y es algo que este redactor nunca, hoy en día tampoco, ha conseguido entender, al menos en lo relativo al precio. A menudo la superior tarifa se pretendía justificar porque se trataba de versiones con producciones más cortas o con equipamientos y prestaciones superiores. En realidad, lo que se buscaba era ganar más dinero con unos automóviles que resultaban tremendamente seductores merced a una estética exterior muy deportiva, y por los que muchos usuarios estaban dispuestos a pagar más para conseguir hacerse con el coche de sus sueños.

Sin embargo, a esta regla generalizada le ha salido una excepción muy notable, la del Kia Pro-Cee'd, ya que este atractivo tres puertas que acaba de llegar al mercado nacional se ofrece a un precio inferior al de la versión de cinco puertas del cada día más popular Cee'd, lo que lo convierte en un seductor que rompe moldes, reglas no escritas y prejuicios. Kia lo presenta como un turismo "más sofisticado, caracterizado por todas las mejoras de su hermano de gama, y que evoluciona de manera espectacular en la apariencia deportiva que hizo tan popular a su predecesor". Dotado de diseño, ingeniería y fabricación exclusivamente europeos -se produce en la planta eslovaca de Zilina-, se inscribe en la línea de diseño exterior establecida por su hermano de cinco puertas, aunque con un tono claramente más deportivo y ligeras variaciones que se aprecian en los faros delanteros antiniebla, la parrilla frontal, las ópticas traseras y, lógicamente, la vista lateral con su carrocería de tres puertas.

La imagen exterior es sin duda el valor más característico y diferenciador respecto al resto de la gama Cee'd. El propio presidente y director de diseño de Kia, Peter Schreyer, define al Pro-Cee'd como "un coche que transmite emoción y energía de principio a fin; sabes con una sola mirada que es el coche que quieres conducir, no solo poseer". Este Kia definitivamente entra por lo ojos, también por su cuidada elección de tonos exteriores, que en nuestro mercado estará compuesta por cinco colores: el sólido Cassa White y los metalizados Machine Silver, Infra Red, Techno Orange y Black Pearl.

MÁS ESTILIZADO La nueva carrocería del Pro-Cee'd se muestra claramente más estilizada que la de su hermano de cinco puertas merced a su superior largura (crece 50 milímetros para llegar a los 4,31 metros) y menor altura (baja en 20 milímetros para quedarse en 1,43 metros), con una anchura situada en 1,780 metros (10 milímetros menos) y una distancia entre ejes idéntica de 2,650 metros. Asimismo, la línea de techo desciende todavía más, hasta los 40 milímetros, lo que remarca su deportividad, según indica la marca, que también recuerda que la superior longitud le reporta un maletero más capaz, con 380 litros que crecen hasta los 1.225 litros con los asientos traseros plegados.

Kia precisa que "el interior es completamente nuevo y se caracteriza por un aspecto y tacto más distinguidos -con materiales blandos-, una mayor calidad percibida y un panel de mandos mejorado y orientado hacia el conductor", sin olvidar una habitabilidad muy satisfactoria.

El equipamiento será otros de los puntos fuertes de este Pro-Cee'd. A un eficaz y confortable bastidor con suspensión delantera MacPherson y trasera multibrazo, esta última un lujo cada día más caro de ver incluso en modelos con precios claramente superiores, este Kia suma su dirección eléctrica con asistencia variable según tres modalidades de conducción (confort, normal y deportiva), conexiones USB, AUX e iPod, mandos de control del sonido en el volante, ordenador de a bordo, pantalla TFT de alta resolución, climatizador bizona, techo solar panorámico, arranque a botón con llave inteligente, control de crucero con limitador de velocidad, navegador con cámara de asistencia al estacionamiento, luces diurnas de leds, ópticas de iluminación fija automática en giro, faros de xenón direccionales, sistema de asistencia al estacionamiento, seis airbags, numerosas ayudas electrónicas a la conducción (ABS, EBD, BAS, ESP, VSM, HAC y ESS), freno de estacionamiento eléctrico, control de la presión de neumáticos, sistema de asistencia de mantenimiento de carril y mecanismo de parada y arranque automático en las detenciones, entre otros elementos.

Los motores disponibles serán cuatro, dos gasolina y dos diésel, todos colocados transversalmente sobre el eje anterior, con tracción delantera y cajas de cambios manuales de seis marchas, si bien el gasolina y el diésel más potentes podrán llegar equipados con cajas automáticas de seis relaciones, el primero incluso con la transmisión DCT de doble embrague.

En gasolina la oferta parte del 1.4 CVVT, con 1.398 cc, 100 CV, 137 Nm de par máximo, 182 km/h de velocidad máxima, consumos homologados de 7,9 litros en ciudad, 4,9 en carretera y 6 de promedio y emisiones medias de CO2 de 139 gramos por kilómetro. El tope de gama en gasolina es el 1.6 GDI, con 1.591 cc, 135 CV, 164 Nm, 195 km/h, consumos en ciudad de 8 litros, en carretera de 4,8 litros (manual) y 4,9 litros (automático) y en recorrido mixto de 6,1 litros, con unas emisiones medias de 140 gramos. El diésel de inicio es el 1.6 CRDi VGT 110, con 1.582 cc, 110 CV, 260 Nm, 182 km/h, consumos de 4,7, 3,6 y 4 litros y emisiones medias de 104 gramos; quedando como tope de gama el 1.6 CRDi VGT 128, con 128 CV, 260 Nm, velocidades máximas de 197 km/h (manual) y 190 km/h (automático), consumos en ciudad de 4,2 y 7,2 litros, en carretera de 3,6 y 4,5 litros y en ciclo combinado de 3,8 y 5,5 litros, con emisiones medias de 112 y 145 gramos, respectivamente.

Por último, los precios, con todas las campañas y el PIVE incluidos, permiten acceder a los gasolina con unas tarifas que van de 10.900 a 16.229 euros, en tanto que los diésel, en similares condiciones, se mueven entre 12.737 y 22.658 euros.