madrid. El consumo en los hogares españoles descendió el 0,5% durante el primer semestre del año, hasta 327,14 kilos por persona, según informa el Panel de Consumo Alimentario en los hogares realizado por el ministerio de Agricultura. Respecto al gasto por persona, éste ascendió incrementándose en un 1,2% como consecuencia del aumento de los precios. En total, el gasto de los hogares españoles en alimentación durante este periodo fue de 34.000 millones de euros.

En estos seis meses, los productos que han experimentado un incremento en su compra fueron el azúcar, la nata, la mantequilla y los huevos, debido al aumento de platos preparados dentro del hogar. En este semestre, el pan aumentó un 2,5%, impulsado por el mayor consumo de pan fresco integral, que crece durante este periodo un 7,4% y de la variedad normal, mientras que destaca el descenso de un 15,7% del pan fresco sin sal.

Respecto a otros productos, se incrementó la compra de queso, destacando la variedad bola, que creció un 12%, mientras que también aumentó el consumo de hortalizas frescas, entre las que destaca las judías verdes, los champiñones y setas y los ajos. Sin embargo, cae el consumo de berenjenas, con una caída del 11,3%, y los pepinos, con una caída del 8,4%.

El informe, además, refleja que crece en un 1,3% el consumo dentro de los hogares de patatas frescas, a pesar de venir acompañadas de un fuerte aumento de los precios. Por otro lado, el Panel de Consumo constata que los hogares de retirados y los formados por adultos independientes son los que más han incrementado el consumo de alimentos y bebidas.

Los hogares unipersonales de entre 45 y 65 años aumentaron la compra por encima de la media de algunos productos, como es el caso del jamón ibérico, del vino con denominación de origen, del queso fresco, de frutas y de hortalizas frescas. Por su parte, los hogares de jubilados incrementaron el consumo de carne, derivados lácteos, legumbres y hortalizas frescas por encima de la media de los hogares durante el primer semestre.

Los de Madrid y Bilbao son los hogares que más han aumentado su consumo de alimentación durante estos seis meses con un 1,9% y 1,5%, respectivamente, así como los de Barcelona (0,6%), que destacan por tener el consumo per cápita más elevado dentro de los hogares metropolitanos.