El Banco Central Europeo mantiene los tipos en el 0,5% y no descarta bajarlos más

draghi conservará estos niveles "por un extenso periodo de tiempo", sin determinar

Remarca que la actividad económica se está estabilizando y que la recuperación tendrá lugar de forma gradual

FRáNCFORT. El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, renovó ayer el compromiso de la entidad "por un extenso periodo de tiempo -sin determinar-" con un nivel como el actual, o incluso inferior, de los tipos de interés, mientras que garantizó un abundante suministro de liquidez a los mercados. "El Consejo de Gobierno confirma que espera que los tipos fundamentales del BCE se mantengan en los niveles actuales o inferiores por un periodo extenso", dijo Draghi en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, que mantuvo los tipos de interés en el mínimo histórico del 0,5%.

En este sentido, el banquero italiano no entró en detalles sobre las discusiones en el seno del Consejo, limitándose a informar de que sus miembros apoyaron unánimemente las directrices de la institución sobre política monetaria.

Al ser cuestionado sobre cuánto tiempo es un periodo extenso, el presidente del BCE volvió a declinar cuantificarlo y explicó que la proyección se relaciona con las expectativas de inflación, que, a su vez, están vinculadas a las perspectivas económicas. Además, el economista italiano rechazó las críticas que alertan de una elevada inflación si se continúa con esta política de dinero barato que prefiere no concretar hasta cuándo la va a mantener.

En este sentido, Draghi señaló que la información disponible apunta a que la actividad económica se estabiliza y la recuperación tendrá lugar de forma gradual. "Los riesgos para la eurozona continúan apuntando a la baja", dijo el presidente de la institución, incluyendo una mayor debilidad de lo previsto de la demanda global o una aplicación más lenta de las reformas estructurales.

No obstante, al cumplirse un año de sus declaraciones en Londres en defensa del euro, Draghi destacó la notable mejoría en la eurozona y apuntó que, a su juicio, es difícil encontrar algún país de la región que no haya mejorado su situación. Draghi se declaró "impresionado" por la evolución observada en los países de la zona euro y dijo que en ningún caso se había constatado que las medidas no hubieran tenido el efecto esperado. Así destacó la evolución observada en las exportaciones de países como España, donde está teniendo buenos datos.

Respecto a la evolución de la inflación, el presidente del BCE subrayó que las perspectivas se encuentran "firmemente ancladas", apuntando que no aprecia riesgos de deflación en ninguno de los países de la región al ser preguntado por la situación que atraviesa Portugal.

El presidente del BCE insistió en la necesidad de que se apliquen las reformas puestas en marcha en los distintos países de la eurozona, al tiempo que defendió las medidas aprobadas en relación con el sistema de activos de garantía y que facilitarán el crédito. Gracias a esas políticas se ha logrado activar "los dos canales de actuación", afirmó, en relación a los tipos de interés, por un lado, y la tranquilidad en los mercados financieros, por otro.

Además, el consejo de gobierno decidió dejar inalterada la tasa de interés de la facilidad marginal de crédito, a la que presta el dinero a un día, en el 1% y la facilidad de depósito, a la que remunera el dinero, en el 0 %.

Draghi, a su llegada ayer a la rueda de prensa. Foto: efe

No especifica si se harán públicas las actas

Draghi dijo ayer que la entidad estudia "una comunicación más amplia" de las decisiones y de su argumentación, aunque sin especificar si se harán públicas las actas de la discusión de cada reunión. Así, señaló que el comité ejecutivo presentará al consejo la propuesta para discutirla y que el reto es que no se politice la discusión de política monetaria al comunicarla de forma más amplia. Draghi destacó que la política de comunicación del BCE ha ido cambiando en los últimos años y afirmó que otros bancos centrales habían adoptado algunas de esas prácticas, como las conferencias de prensa al término de las reuniones del consejo de gobierno. El BCE, añadió, se propone avanzar y mejorar la política de comunicación "de una manera inteligente", para hacerla más clara y transparente. Advirtió, sin embargo, que debía tenerse en cuenta que la institución no representa un solo país, como sus equivalentes de EEUU o Japón, sino al conjunto de los intereses de los 17 países de la zona euro. Toda decisión en ese sentido debe ser adoptada y asumida por el conjunto de miembros.