Berlín. El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, acudirá hoy a Atenas con un programa de créditos para pequeñas y medianas empresas por valor de 100 millones de euros debajo el brazo, según adelantó ayer el diario económico alemán Handelsblatt.

Según esta información, el banco público alemán de fomento KfW será el encargado de conceder los préstamos a las empresas griegas con el Estado alemán como aval. De hecho Schäuble estará acompañado durante su visita de hoy a Atenas por el presidente del KfW, Ulrich Schröder. En cualquier caso, según cita la agencia DPA, el KfW no será el único en poner fondos, ya que también la Unión Europea destinará dinero de los fondos estructurales para intentar paliar en cierta medida la falta de crédito en el país heleno. Asimismo, también está previsto que participe el Banco Europeo de Inversiones (BEI).

En total, Grecia podría disponer de 500 millones de euros destinados a mejorar la situación de las pymes.

Pero la visita de Schäuble tendrá lugar justo después de que el Parlamento griego vote la nueva ronda de recortes impulsada por la troika -Comisión Europea, Fondo Monetario Internacional y Banco Central Europeo- que contempla despidos de empleados públicos. Hasta finales de 2014 serán despedidos 15.000 funcionarios y de ellos 4.000 antes de que termine este año.

IVA Por otro lado, ayer se supo que el Gobierno de Grecia rebajará a partir del próximo día 1 de agosto el IVA a los restaurantes, bares o cafeterías. Lo hará desde el 23% fijado hasta ahora hasta el 13% y lo ejecutará además con el visto bueno de la troika, según anunció el primer ministro, Antonis Samaras.

El Gobierno heleno está convencido de que esta medida "aumentará en vez de disminuir" los ingresos del Estado y reducirá del mismo modo la evasión fiscal. Samaras también subrayó ayer que con esta rebaja se evitará el cierre de establecimientos y se creará nuevos empleos. En este sentido, el primer ministro admitió ayer que, pese a no creer que todas esas ventajas se vayan a cumplir, la troika se ha mostrado por primera vez a favor de una rebaja de impuestos que el Gobierno griego prometió hace ahora un año.