juan maría aburto
consejero de empleo y políticas sociales
Juan Mari Aburto posa antes de la entrevista en el exterior de las instalaciones del Gobierno Vasco en Gasteiz. Fotos: paulino oribe
"Tenemos menos dinero, pero las políticas de empleo y las ayudas son prioritarias"
El consejero de Empleo y Políticas Sociales, Juan María Aburto, asume que la caída de la recaudación prevista afectará a su Departamento, pero centrará el ajuste en Vivienda para no tocar ni la cuantía ni el acceso a la RGI. Ultima un plan de empleo y una profunda reforma de Lanbide.
adrián legasa
vitoria. Aburto tiene sobre la mesa un puzzle de mil piezas difíciles de encajar. Reducir el paro, mantener las ayudas y la cohesión social, sacar a Lanbide de la UVI, facilitar el alquiler de vivienda a jóvenes y parados y recuperar el diálogo social. Todo ello "con menos dinero". "Difícil, pero no imposible", se anima.
Euskadi tiene 175.000 parados, muy cerca del récord histórico. ¿Por dónde se aborda un dibujo tan negro?
El reto es enorme porque detrás de los datos hay 175.000 familias con necesidades básicas que en algunos casos no son cubiertas. El Gobierno está trabajando en un plan de reactivación económica que incluye un fondo adicional para financiar a las pymes, y en un plan de empleo que se presentará en semanas. El empleo no se crea por decreto, pero sí sentaremos las bases para la recuperación cuando la actividad económica mejore. En este sentido parece que en el segundo semestre del año podrían llegar síntomas leves de mejoría.
¿Qué le diría a una persona que lleva años en paro y no encuentra nada?
Que no olvide que a mayor formación más posibilidades de lograr un empleo cuando la situación mejore. También le diría que en Euskadi tenemos la suerte de contar con un sistema de protección social como es la Renta de Garantía de Ingresos que debe utilizarse para esos momentos de tránsito de una situación de desempleo hacia el empleo. Con estas dos medidas un parado yo creo que está en condiciones de salir del túnel.
La reforma laboral ha disparado el número despidos vía ERE.
La reforma no me gusta, entre otras cosas porque facilita el despido. Si una empresa acumula tres trimestres seguidos de pérdidas puede despedir sin tener en cuenta si los años anteriores ha tenido beneficios. Es una reforma que no sirve, y creo que el Gobierno español se está dando cuenta. Pero no creo que la reforma esté siendo la causa principal del desempleo, sino la caída de la actividad. Un ERE es grave porque hay pérdida de empleo, pero la empresa sigue ahí y podrá generar empleo en el futuro. Pero cuando una empresa desaparece ya no hay nada que hacer.
Dice que el Gobierno central se está dando cuenta de que la reforma no sirve. ¿Cree que podría llegar a replantearse algunos puntos?
Creo que puede haber movimientos en ese sentido. Desde luego la reforma es contraproducente.
Ha mencionado un plan de empleo inminente en Euskadi. ¿Le afectará el ajuste de 1.200 millones?
1.200 millones menos son muchos millones. Es más de lo que tenía este departamento en 2012. Prefiero ir de frente y reconocer que va a haber menos dinero también en mi Departamento, pero el ajuste fundamental se va a aplicar a Vivienda. Que el ajuste va a afectar al plan de empleo es seguro, pero lo hará en menor medida. Las políticas activas, como las ayudas sociales, son prioritarias.
¿Cuáles son los ejes del plan?
Me preocupa el paro juvenil. Con tasas de paro del 40% entre los jóvenes el modelo de sociedad que conocemos puede estar en quiebra. Tenemos jóvenes bien preparados y hay que posibilitar que desarrollen proyectos empresariales. También nos preocupa el colectivo de parados mayores de 45 años y de larga duración. Es un colectivo de difícil empleabilidad y a eso hay que darle la vuelta para que puedan trabajar. Otro foco serán las personas en riesgo de exclusión y discapacitadas y las mujeres con hijos a su cargo.
También habló en el Parlamento de dar un impulso a las cooperativas.
El auzolan ha sido una seña de identidad de nuestro pueblo. El mundo cooperativo significa alrededor de un 7% del PIB vasco y está demostrando que, con sacrificios, puede mantener el empleo. Habrá un plan para que los jóvenes, a través de la universidad, pueden crear cooperativas reales, que llamamos junior-cooperativas. Es un proyecto en el que tenemos depositada mucha ilusión.
¿Qué presupuesto tendrá el plan?
Aún no hemos cerrado los Presupuestos del año, pero lo sabremos en pocas semanas. El 8 de marzo hay un monográfico en el Parlamento sobre empleo cuyas resoluciones sería bueno que se incluyesen en este plan.
La otra pata maestra para crear empleo, la línea de crédito a pymes con las EPSV, no gusta a algunos sindicatos. ¿Paraliza eso el proyecto?
Los acuerdos en las EPSV hay que tomarlos en las juntas de gobierno, en las que está representada la parte social, por lo que hablar con los sindicatos es fundamental. Tenemos que ser capaces de sentarnos en una mesa y buscar acuerdos. Nadie se puede quedar al margen ni de los problemas ni de las soluciones.
Ha confesado que una de sus grandes preocupaciones es Lanbide.
Con la reforma planteada en la legislatura anterior Lanbide asumió la prestación de la RGI, y con ello otras 60.000 personas que llegan cada año a las oficinas. La idea era buena en concepto, pero requería de un periodo transitorio mayor. El cambio se quiso activar de golpe y eso ha desbordado al personal de Lanbide. La situación nos tiene preocupados pero sobre todo ocupados. Nos hemos reunido con los directivos de las oficinas de Bizkaia y Araba y el lunes -por mañana- nos reunimos con los de Gipuzkoa. Tienen ganas de hacer las cosas bien y de volver a prestar un servicio de intermediación laboral.
¿Qué cambios habrá?
Tenemos que atender de otra forma a los colectivos cuyas necesidades tienen más que ver con la intermediacion social que con la laboral, como los pensionistas, que no tiene sentido que vayan a Lanbide. Así podremos tratar mejor a las personas que son empleables. Los directores de Lanbide deben estar en contacto con las empresas del entorno, ver sus necesidades y dar una formación a los parados acorde con ellas.
¿Qué opinan los directores?
Con la carga de trabajo que tienen ahora todo esto les abruma, pero se nota que es lo que les ilusiona.
¿Volverá la RGI a las diputaciones?
El que quiera podrá seguir cobrando la RGI en Lanbide, pero estamos buscando entidades colaboradoras, como las diputaciones y Eudel. Aún no hay nada concreto, pero no sería extraño ver que algún ayuntamiento o diputación quiera colaborar.
Los directores reclaman más trabajadores en las oficinas.
Ya les he dicho que no va a ser posible. Con el personal que tenemos hay que actuar de la mejor manera posible, por eso hay que cambiar los procesos para descargarles de trabajo.
Asegura que no habrá una reducción de la cuantía de la RGI pero, ¿habrá restricciones en el acceso?
No va a haber ninguna restricción. Es más, debemos posibilitar que las personas que están usando un servicio residencial puedan acceder a la RGI porque sería una parte importante en la incorporación social y podría usarse para que tengan recursos para el copago de esos servicios.
Existen críticas porque las ayudas producen un 'efecto llamada'. ¿Son críticas fundamentadas?
Me da rabia que se hable de fraude en las políticas sociales. Las personas que vienen aquí vienen a trabajar. Existirá un porcentaje de fraude, sin duda, pero no se puede generalizar ni hacer un estigma. Voy a intentar no hablar de fraude y a trabajar para que no exista.
Ha hablado de establecer prioridades en las ayudas a familias con hijos, ¿eso implica recortar la cantidad?
Vamos a mantener las ayudas por hijo. Pero se introducirá el criterio de renta, de tal manera que las personas con menos renta cobren más y los que tienen más cobren menos.
Sumando todas las ayudas sociales, ¿se va a mantener el gasto?
Vamos a mantener todas y cada una de las ayudas que presta el Gobierno: RGI, prestación complementaria de vivienda, ayudas de emergencia social y ayudas por hijos y para la conciliación familiar.
El grueso del ahorro recaerá por tanto sobre el área de Vivienda.
Sí. Habrá que diferir gasto a los próximos años y actuar más sobre lo ya edificado. Queremos que la política de vivienda sea la política de vivienda en alquiler, no la compra. Alquileres que supongan no más del 25 ó 30% de los ingresos, que permitan a los jóvenes, junto con un empleo, iniciar proyectos vitales y acceder luego al mercado de vivienda libre.
¿Ve viable la dación en pago?
Es algo justo. Primero hay que intentar que la familia pueda seguir pagando la hipoteca en otras condiciones, y si no es posible forzar la dación en pago. Si todo falla, nuestro Departamento ya está disponiendo de viviendas propias para quien es desahuciado por motivos sociales.
"El Gobierno español
se está dando cuenta
de que la reforma laboral no sirve y podría haber algunos movimientos"
"Puede ser que algunos ayuntamientos o diputaciones quieran ayudar con la RGI para descargar a Lanbide"
"No va a haber ninguna restricción en el cobro de la RGI. Se mantendrán todas las ayudas que presta este Gobierno"