madrid. La visita que ayer hizo el presidente del Banco Central Europeo al Congreso español se celebró a puerta cerrada pero a web abierta. Dos diputados de Iniciativa per Catalunya-Els Verds (ICV) decidieron retransmitir las palabras de Draghi como protesta por el secretismo de su comparecencia. Sin embargo, tuvieron que hacerlo en diferido debido al boicot realizado por parte de la Cámara española.
El propio Draghi, en la rueda de prensa que ofreció al término de su comparecencia en el congreso, aseguró que él no tenia "problema" en que la sesión se hubiera celebrado en abierto. A esto añadió que "de todas maneras, se ha retransmitido. No creo que nadie se haya perdido nada", subrayó.
El presidente de la Cámara, Jesús Posada, reconoció que fue él quien decidió los criterios de la comparecencia de Draghi. "He intentado que no se radiara en directo la intervención pero era inevitable que saliera fuera", aseguró Posada, quien reconoció que le hubiera gustado que el comportamiento de algunos parlamentarios se hubiera ajustado a lo establecido.
Algo que intentó forzar para lo que se cortó el wifi del Congreso y se instalaron inhibidores de frecuencia durante la comparecencia para inhabilitar los móviles de los diputados y que no pudieran retransmitir el discurso.
De esta forma el Congreso evitó la difusión en directo de la comparecencia pero no su difusión en diferido ya que ICV publicó ayer en internet vídeos grabados con un dispositivo móviles de esta comparecencia. Un hecho contra el que el presidente del Congreso avanzó que no adoptará medidas contra los diputados.