Berlín. Angela Merkel, canciller alemena y Mariano Rajoy, presidente del Gobierno español, dieron fin ayer -al menos de forma pública- a sus discrepancias sobre las políticas de estímulo que a juicio del popular debe asumir también Alemania.

Así, Merkel dio la razón a Rajoy sobre el esfuerzo "que también alemania tiene que hacer para estimular el crecimiento" europeo y aseguró que, especialmente, el paro juvenil la "entristece" por lo que anunció que los líderes europeos adoptarán medidas para combatirlo en el presupuesto plurianual de la UE para el periodo 2014-2020 que tienen previsto aprobar en la cumbre de esta misma semana. La dirigente germana se comprometió a ayudar a España a mejorar su sistema de formación profesional y a facilitar que los jóvenes españoles hagan prácticas en empresas alemanas. También ofreció reforzar el papel del portal europeo de ofertas de trabajo Eures para que haya más movilidad laboral en la UE.

Pero la economía española sigue sin despegar pese a que en las últimas semanas se había intuido cierta mejoría en los mercados macroeconómicos -que ayer pareció desmoronarse-. Mejoría que, en cualquier caso no ha llegado aún a las calles españolas. Ayer Mariano Rajoy y Angela Merkel, mantuvieron una cumbre bilateral con varios ministros de ambos países y en ella Rajoy anunció que su Gobierno prevé lanzar este mes un "importante paquete de medidas" para estimular el crecimiento económico y el empleo, principalmente enfocado a las pymes y a la lucha contra el desempleo juvenil, sin aportar más detalles.

Nuevas reformas La troika -formada por el FMI, el BCE y la Comisión europea- que revisa las exigencias del rescate que España solicitó para su banca, concluyó ayer que pese a los "grandes progresos" alcanzados, el Estado debe incidir en las reformas estructurales y aportar "más avances" en ajuste fiscal. La Comisión y el Banco Central Europeo afirmaron que la reestructuración de la banca española "continúa a buen ritmo", pero recomendaron al Gobierno mantener la vigilancia y seguir trabajando en las reformas del sector. Por su parte, el FMI advirtió de la persistencia de los riesgos para la economía española y, por lo tanto, para el sector financiero del país.

El gasto excesivo sigue siendo una preocupación para los agentes internacionales. Ayer, el presidente Rajoy anunció que el déficit estructural en España no ha alcanzado los objetivos marcados, ya que se ha reducido en torno a un 3,5% en 2012, pero subrayó que España va a seguir reduciendo el déficit y haciendo reformas estructurales.

Los mercados dan la espalda a España

La imagen de España en el exterior se deteriora a pasos agigantados y los indicadores económicos lo sufren. Al menos así lo entienden los mercados internacionales, que ayer volvieron a mostrar sus dudas en la recuperación económica. Las renovadas cifras del paro, las llamadas de atención de la troika y muy especialmente el escándalo que salpica a la cúpula del PP -con el propio Mariano Rajoy a la cabeza- hicieron que la Bolsa española viviera un lunes negro y la prima de riesgo subiera con fuerza. Tanto, que este indicador que muestra el nivel de confianza en la deuda española alcanzó su máximo en lo que va de año, escalando más de treinta puntos en una sola jornada, hasta los 383 puntos. El bono español a diez años alcanzó así una rentabilidad del 5,46%, cuando el bono alemán se situó en el 1,61%. Cabe destacar que esta semana el Tesoro Público intentará colocar entre 3.500 y 4.500 millones de euros en bonos y obligaciones, por lo que lo hará en un contexto especialmente complicado. Por su parte, el Ibex 35 se dejó ayer casi un 4% y perdió el nivel de los 8.000 puntos. En concreto, se despeñado un 3,77% anotando su mayor descenso en los últimos cuatro meses.

Merkel afirma que quiere facilitar que

los jóvenes españoles hagan prácticas en empresas alemanas