MADRID. Las cinco principales entidades del sector financiero español obtuvieron un beneficio neto conjunto de 1.731,9 millones de euros el año pasado, el 82,88% menos que en 2011, resultado condicionado por cerca de 50.000 millones de euros que destinaron a sanear su cartera crediticia.
El conjunto del resultado del Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Banco Sabadell y Banco Popular ha sufrido una cuantiosa caída respecto a 2011, cuando ganaron 10.120 millones, por las provisiones dirigidas a cubrir créditos dudosos o fallidos de la cartera general o inmobiliaria.
El Banco Popular ha vivido en este 2012 uno de sus peores años. La entidad ha sido determinante en el hundimiento de la banca ya que ha incurrido en unas pérdidas de 2.461 millones de euros. En gran parte, esto fue debido a los fondos apartados para sanear sus cuentas (9.600 millones), obligados por la reforma financiera aprobada por el Gobierno hace un año. El aspecto positivo es que la entidad ha logrado su objetivo de sanear su cartera crediticia.
Si no se contara con las pérdidas de Banco Popular el beneficio de los grandes bancos españoles también habría descendido, aunque el resultado sería diferente. Si excluimos esta entidad, las ganancias se habrían quedado en 4.193 millones con en un retroceso del 58,88%.
En cuanto a los datos individuales, el Banco Santander lideró la lista de ganancias en 2012 con 2.205 millones de beneficios, el 59% menos, así como la relación del dinero destinado a cubrir créditos, partida que engulló 18.000 millones.
El BBVA logró un resultado neto de 1.676 millones, el 44,2% inferior al de 2011, después de anunciar que había dedicado a provisiones crediticias 9.518 millones y que prácticamente había completado la cobertura de los préstamos inmobiliarios en España.
CaixaBank ganó 230 millones, con un descenso del 78,2%, y con unas dotaciones sobre la cartera crediticia de 10.299 millones, en tanto que Banco Sabadell tuvo un beneficio de 81,9 millones de euros (el 64,7% inferior), con unas provisiones de 2.540 millones.